José Morales Martín. A principios del mes de febrero leía que "el escritor y profesor argentino Jorge Scala da la voz de alarma en España: 'La ideología de género es más dañina que el nazismo o el marxismo'".

 El escritor y profesor argentino que es el autor de "La Ideología de género o el género como herramienta de poder", pasó por Madrid para presentar su libro y participar en un seminario de dos días dedicado a explicar lo que es esta ideología, asumida por el Gobierno de Rodríguez Zapatero y cómo afecta al individuo y a la sociedad. Igualmente ha pronunciado varias conferencias sobre el mismo tema con una afluencia numerosa de público. 

 En una de estas conferencias, ante un amplio grupo de profesionales de la educación, el escritor mostró su extrañeza ante el desconocimiento que existe en nuestro país de esta ideología que, a su juicio, "es más dañina que la nazi o el marxismo", porque la Ideología de Género destruye la parte nuclear de la persona, su antropología sexual, en palabras del propio Jorge Scala. Todas las ideologías dejan siempre vidas humanas: los nazis mataron 50 millones de personas, el marxismo más 100 millones y la ideología de género más de 40 millones de abortos cada año"... Jorge Scala ponía este ejemplo para que se comprendiera mejor lo que significa esta nueva ideología en relación con la vida humana, si bien "el verdadero objetivo de la Ideología de Género es eliminar la capacidad de conocimiento personal sobre lo que cada persona es en sí mismo de forma cierta y no supuesta".

 En otra de sus intervenciones aclaró por qué el aborto es una de las condiciones más necesarias para la implantación de la ideología de Género: "Si esta ideología busca la construcción del nuevo ser humano destrozando la antropología sexual de la persona, de forma que el hombre y la mujer no sean iguales, sino idénticos, sólo hay un escollo que salvar para lograr esto: el embarazo. Si el aborto es totalmente gratuito hasta el minuto anterior de dar a luz, la mujer podrá decidir "libremente" si desea ser o no idéntica al hombre en cuanto a sus circunstancias personales y sociales y estar en condiciones idénticas para competir con el hombre". Pienso que "al buen entendedor pocas palabras le basta", las de Scala son  claras y contundentes.