"The Economist" advierte que España puede arrastrar a Europa en la crisis "subprime"
Redacción Madrid. 14 de agosto.
El deterioro de la economía española es capaz de arrastrar hacia abajo al resto de países de la Unión Europea, zona que podría convertirse en "la mayor víctima" de las restricciones financieras mundiales, a pesar de que Estados Unidos fuera el origen de la crisis 'subprime', según un artículo de 'The Economist'.
"La crisis de crédito comenzó en América, pero Europa puede convertirse en la mayor víctima de todas", dice la revista, que advierte de las consecuencias negativas que la ralentización económica española podría tener sobre la evolución del resto de Estados miembros a raíz del parón de la construcción y del sector inmobiliario.
A su parecer, Irlanda es "demasiado pequeña" como para que sus problemas económicos lastren a otros países, pero la economía española, que atraviesa "un doloroso shock" por el reajuste de una burbuja inmobiliaria engordada durante años, "tiene peso suficiente como para infligir daños colaterales".
La revista recalca que hasta hace poco tiempo, España suponía la octava parte del Producto Interior Bruto (PIB) europeo pero que, además, representaba un porcentaje aún más importante en cuanto a la generación de consumo y empleo, de los que se beneficiaban otros países comunitarios a través de sus exportaciones, por ejemplo.
En este sentido, recuerda cómo la multinacional británica Vodafone culpó al mercado español del deterioro de sus beneficios, prueba de que "las ondas" de dificultades que atraviesa la economía española "van más allá de la costa nacional", al haberse integrado por completo en el entorno globalizado.
"Viviendas vacías o a medio construir se han convertido en exponente de los problemas económicos en España", dice la prestigiosa revista, que ve la urbanización fantasma de Seseña (Toledo) y la suspensión de pagos de Martinsa Fadesa como vivos ejemplos de la gravedad del parón del ladrillo en España.
"Miles de compradores temen que nunca verán sus viviendas terminadas o, incluso peor, que nunca recuperarán su dinero", mientras los precios de las propiedades inmobiliarias en el Mediterráneo han caído un 6% en el primer semestre, frente a la media del 3,9% en España, subraya, citando a la tasadora Tinsa.
No obstante, 'The Economist' reconoce que "no hay mucho" que el Gobierno español pueda hacer para mejorar el panorama, a pesar de haber convocado un gabinete de crisis para abordar medidas para luchar contra la ralentización económica.
La revista aludía así a la comisión delegada de asuntos económicos que el presidente, José Luis Rodríguez Zapatero, encabezó antes del Consejo de Ministros celebrado hoy que aprobó un paquete de 24 medidas económicas para atajar el frenazo y estancamiento de la economía.
A su parecer, el Ejecutivo español tiene una "limitada capacidad de maniobra fiscal", tal y como reconoció el vicepresidente y ministro de Economía y Hacienda, Pedro Solbes. "No hay medidas mágicas", dijo el responsable, según recoge la revista.
"Los efectos de la caída (de precios) en propiedades y la quiebra de constructoras se sienten dramáticamente", advierte. El problema de España no radica en que sufra más que otros países europeos, sino que antes estaba mucho mejor que ellos, considera. "Hinchados por un crédito barato y una burbuja inmobiliaria, se convirtió en un sitio donde ganar dinero fácil", estima.