El Banco de España dice que el "ajuste profundo" de la economía continuará
El director del Servicio de Estudios del Banco de España, José Luis Malo de Molina, pronosticó hoy que en los próximos trimestres "continuará el proceso de ajuste" de la economía española, y agregó que "la intensidad y duración" de esa situación es "difícil de anticipar".
Según explicó, en los últimos meses se "ha acentuado el proceso de ajuste" en España que, si bien era "necesario y previsible" desde hace "algún tiempo" por los "excesos del 'boom' inmobiliario", pasó de empezar "de manera suave y gradual" a convertirse en un ajuste "profundo", que se vio "precipitado por condiciones externas", como la crisis de las 'subprime' o el incremento del precio del crudo.
Además, Malo de Molina recordó que el Banco de España ya alertó en 2003 de que existía una "sobrevaloración" en los precios de las viviendas, a la que se unió una "sobrerreacción" en las cantidades de inmuebles construidos, de modo que en 2008 la producción de viviendas terminadas "va a ser el máximo" de la historia, según dijo.
Explicó también que el ajuste del sector inmobiliario incide "en el conjunto de la economía", dado que la reducción del número de viviendas disminuye "el ritmo de creación de empleo", además de afectar a la confianza y a las expectativas actuales y futuras de renta y capacidad de gasto.
DEBILITAMIENTO DEL CONSUMO PRIVADO.
Por todo ello, resaltó la importancia de reactivar el consumo privado, que muestra "claros síntomas de debilitamiento desde principios de 2008", puesto que, en su opinión, es el "componente que más está contribuyendo a la desaceleración económica, más incluso que la desaceleración o ajuste en el sector inmobiliario", dijo.
A pesar de describir este panorama, Malo de Molina rehusó referirse a la actual situación económica con el término 'crisis' al considerar que posee "connotaciones" de carácter político "que un banco central debe evitar", por lo que sostuvo que el Banco de España debe "mantenerse distanciado" de ese "debate terminológico" y dedicarse a realizar otro "de sustancia".
Preguntado por la deducción de 400 euros en el IRPF, indicó que es una devolución de impuestos, que "tiene un coste presupuestario importante", pero que su efecto sobre el consumo privado "se puede ver aminorado" dada la "incertidumbre" existente.
Por todo ello, pidió que la política económica se oriente a "mantener la estabilidad presupuestaria", a "combatir la inflación" mediante el refuerzo de la estabilidad de precios, y a potenciar la competitividad y aumentar la flexibilidad para "reiniciar la senda del crecimiento".
Malo de Molina, que participó en un almuerzo-coloquio sobre 'El ajuste de la economía española' en Valencia, organizado por la Asociación para el Progreso de la Dirección (APD) Zona Levante, destacó que "lo importante es que la política española se oriente a ayudar al ajuste y a conseguir fomentar el crecimiento económico a medio plazo".
No obstante, estimó que "cabe esperar" que la economía española cuente actualmente con "los suficientes resortes" gracias a los esfuerzos realizados durante los últimos años para que "pueda reemprender pronto una nueva senda de crecimiento", al tiempo que resaltó que los "principales resortes" serán "la competitividad y la flexibilidad", por lo que recalcó que "ahí se deben dirigir todos los esfuerzos".
SUPERÁVIT Y ESTABILIZADORES AUTOMÁTICOS.
Con el fin de mantener la estabilidad presupuestaria, José Luis Malo de Molina abogó por que el superávit de las cuentas públicas se destine a "ayudar a establecer un suelo sin ir más allá del juego de los estabilizadores automáticos", ya que ello podría conllevar, en su opinión, "problemas" para las finanzas públicas.
En este sentido, incidió en que el Gobierno "hace bien" al utilizar el margen acumulado por la "saneada situación presupuestaria" para "dejar actuar a los estabilizadores automáticos", que consideró de gran utilidad para "cuando la economía se debilita y cae la recaudación" y cuando al incrementarse el desempleo, aumenta también "muy rápidamente" el gasto por desempleo.
Malo de Molina subrayó que son elementos "útiles, poderosos y que se pueden utilizar porque hay superávit", aunque hizo hincapié en que "no se debe ir más allá de eso" o en caso de hacerlo para atender a las necesidades específicas de algún sector, se deben "compensar esas actuaciones con otras de sentido contrario" en los Presupuestos para que "la parte que no depende del ciclo económico no se vea afectada".
"DETERIORO DE LA CONFIANZA".
En cuanto a los efectos de la crisis financiera mundial iniciada por la crisis de las hipotecas 'subprime' en Estados Unidos, remarcó que sus principales efectos fueron los "indirectos" sobre "el deterioro de la confianza del consumidor", el "endurecimiento de las condiciones financieras mundiales" y el traslado de los mismos al terreno inmobiliario.
Además, apuntó que la crisis hipotecaria de Estados Unidos "más allá" de eliminar "productos tóxicos" como las 'subprime', provocó una "reevaluación de los riesgos", que hasta el momento era "muy baja y benigna", así como un "endurecimiento de las condiciones financieras" que se tradujo en subida de los tipos y de las primas sobre éstos.
Así, concretó que desde que se inició la subida de los tipos de interés, éstos se han visto incrementados en 2,75 puntos reales, de los que 2,25 puntos son imputables al "ajuste de las condiciones monetarias" y el medio punto restante corresponde al citado "incremento de las primas" provocado por el impacto mundial de la crisis 'subprime'.