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Diario YA


 

mejora a la versión clásica

El hogar de Miss Peregrine para niños peculiares vs los 7 magníficos

Víctor Alvarado

Guste más o menos. Te resulte más o menos atractivo. Hay que reconocer que el cineasta Tim Burton es siempre fiel a su especial universo de seres “monstruosos” ,que tienen su particular corazoncito

El caso es que se estrena la nueva producción salida de su factoría como El hogar de Miss Peregrine para niños peculiares, que ha contado con un elenco de lujo de veteranos de alta calidad como Samuel L Jackson en un papel histriónico acertadísimo, que no se pierde una película fantástica o de superhéroes junto a actores más jóvenes como Eva Green o Asa Butterfield, al que recordarán por La invención de Hugo. El director adapta el bestseller de Ramson Riggs. Tim Burton regresa a las historias que le hicieron brillar como Eduardo manostijeras, La novia cadáver o la inolvidable relación de un padre con un hijo en Big fish. La cinta está cargada de guiños cinéfilos a Titánic, Atrapado por su pasado, Jason y los argonautas, Harry Potter o Lady Halcón. La canción de la banda sonora de Florence and The Machine: “Wish That You Were Here” es magnífica.

La película es una mezcla entre historia fantástica y de superhéroes. Tal vez eso se deba al pasado de su guionista, Jane Goldman, especializada en esta temática. Esta producción del gótico cineasta muestra su lado más sensible y nos enseña que las persona, que son o se sienten, diferentes no deben marginarse porque todos somos distintos e irrepetibles, lo que nos hace únicos por lo que seguro que tenemos dones que pueden ponerse al servicio de los demás. Por otro lado, es un homenaje a la entregada labor de los abuelos.

Los siete magníficos
Todos nuestros lectores saben que el germen de esta película parte de uno de los mejores directores japoneses de la historia, Akira Kurosawa, autor de Los siete samuráis que dio lugar a un entretenido largometraje hasta cierto punto con una impresionante banda sonora en 1960, dirigido por John Sturges y protagonizada especialmente por Yul Brynner y un Steve McQueen que, en un principio, iba a ser un secundario, pero que quitó protagonismo a otros intérpretes porque era un auténtico roba planos por lo bien que estaba en todas las escenas. Por tanto, podemos decir que no hay que perderse este potente western y en un año que parece que resurge el género. Está claro que es el remake del remake, pero manteniendo la esencia.

El director ha contado con dos estrellas de lujo como Denzel Washington que no sé si encaja bien como protagonista negro por el racismo propio de la época en la que está ambientada y no debemos perdernos el personaje creado por Ethan Hawke.

Bajo mi humilde punto de vista, esta producción de 2016 mejora a la versión clásica, tanto en la acción de un realizador especializado en ese género, Antoine Fuqua, como en las cuestiones de fondo. Merece la pena destacar el modo en el que se refleja la amistad, la lealtad y las firmes convicciones religiosas de los protagonistas y secundarios que no solo rezan en unas situaciones límite, sino que se percibe que su oración parte de una vivencia de la fe profunda, sincera y auténtica.