Redacción Madrid. 24 de Octubre.

    El parqué madrileño volvió a cerrar una semana 'negra' al desplomarse un 13,4% y situar al Ibex en 8.353 puntos, el nivel más bajo desde hace cuatro años. Los malos datos macro y el temor a que la crisis se extienda a Latinoamérica fueron, en esta ocasión, el detonante para las caídas en picado de todos los mercados en el mundo.

   En sólo cinco días, el Ibex ha perdido más de 1.000 puntos, elevando su caída anual hasta el 45%. De este modo, el selectivo casi ha reducico a la mitad el nivel con el que comenzó el año (15.182 puntos). El desplome semanal de hoy es el segundo más grave que registra el selectivo en un mes, ya que el pasado 10 de octubre sufrió una caída del 21%.

   El Ibex se movió durante toda la semana en el borde de los 9.000 puntos, pero hoy sucumbió al pánico de los inversores y se desplomó hasta los 8.300, temiéndose durante algunos momentos de la sesión que pudiera llegar a perderlos. El pánico volvió a apodararse esta semana de los principales parqués del mundo, ya que tanto Wall Street, como Asia y las plazas europeas también han cerrado un semana trágica.

   Los malos datos macro de esta semana, entre los que se encuentran que la economía británica experimentara en el tercer trimestre la primera contracción desde 1992 o con un crecimiento negativo del 0,5%, o el incremento del paro en España del 11,3%, hasta los 2,59 millones de desempleados, han hecho temer a los inversores un empeoramiento de la situación económica.

   Además, los expertos creen que a esta impresión ha contribuido el recorte de la producción del petróleo por parte de la OPEP, la caída del valor del euro hasta mínimos históricos (1,26 unidades) o el incremento del déficit por cuenta corriente de la Europa hasta los 30.900 millones de euros en el segundo trimestre, un 202,9% más.

   Asimismo, algunas firmas como Standard & Poor's revisaron sus previsiones económicas para Europa a la baja debido a los últimos datos de la zona euro, mientras que algunos bancos de inversión pusieron en el punto de mira a entidades españolas y europeas, al asegurar que podrían necesitar capital.

   El último elemento que ha contrubuido a hundir, la ya de por si mermada confianza de los inversores, vino esta semana de Argentina. El Gobierno de Cristina Fernández de Kirshner anunció la privatización del sistema de pensiones, hecho que hizo temenr a los inversores una extensión de la crisis a la región de Latinoamérica.

   En este contexto, la mayoría de los valores cerraron en negativo, con fuertes desplomes. El valor que más perdió en la semana fue Gamesa (-36,35%), seguido de Santander (-22,95%), BBVA (-19,72%), Repsol YPF (-18,07%), Mapfre (-16,61%), Acciona (-15,95%), Iberdrola Renovables (-15,02%), Banco Popular (-14,73%), Sacyr Vallehermoso (-14,58%), Telefónica (-12,06%) y Criteria (-11,47%).

   Entre los descensos también se situaron Indra (-11,4%), Iberdrola (-10,17%), Acerinox (-9,49%), Ferrovial (-9,28%), OHL (-8,77%), Inditex (-8,74%), Banesto (-8,57%), FCC (-6,73%), Bankinter (-6,67%), Banco Sabadell (-6,38%) y Gas Natural (-6,34%).

   Con recortes inferiores al 3% cerraron Abertis (-2,80%), Cintra (-2,20%), Unión Fenosa (-2%), ACS (-1,63%), Enagás (-0,78%), Técnicas Reunidas (-0,57%) y Endesa (-0,49%).

   Los únicos valores que terminaron en positivo fueron Iberia (+26,43%), que se desmarcó del resto de los valores aupado por las buenas noticias sobre su operación con British y la caída del precio del crudo, seguida de REC (+3,72%), Abengoa (+1,91%), Telecinco (+1,15%).