Montevideo. El Senado de Uruguay ratificó, por 17 votos contra 14, la despenalización del aborto hasta la semana 12 del embarazo, una decisión que espera ahora la promulgación del presidente José Mujica que ya ofreció su apoyo a la norma anti-vida.
La votación se realizó después de que el proyecto fuera aprobado el pasado 25 de septiembre en la Cámara de los Diputados del país.
ACI/EWTN noticias informa que la votación fue posterior a la revelación del resultado de una encuesta realizada con 100.000 llamadas telefónicas que mostró que el 56 por ciento de los uruguayos se oponen al aborto y están favor de la defensa de la vida desde la concepción.
El artículo 2 del proyecto aprobado señala que "la interrupción del embarazo (aborto) no será penalizada, y en consecuencia no serán aplicables los artículos 325 y 325 bis del Código Penal, para el caso que la mujer cumpla voluntariamente con los requisitos que se establecen en los artículos siguientes y se realice antes de las 12 semanas de gravidez".
El proyecto establece que las mujeres que quieran abortar deberán comparecer ante una comisión de médicos y asistentes sociales quienes deberán informarlas sobre su decisión. Tras cinco días de reflexión las madres serán quienes decidan si se someten o no al aborto.
La norma también hace referencia a la objeción de conciencia y señala que los médicos y profesionales de la salud que rechacen practicar abortos deberán hacerlo saber en la institución en la que trabajan y esa medida será aplicable en todas las instituciones de salud donde se desempeñen.
Sofía Reyes del movimiento Provida dijo que los legisladores que han aprobado este proyecto discriminan a las mujeres y aseguró que "con ley o sin ley el trabajo va a seguir siendo apoyar a la madre para que pueda tener ese bebé".
En agosto de este año, 20 organizaciones pro-vida denunciaron graves faltas a la democracia y a los procedimientos, que mostraban la intención del lobby anti-vida de imponer el aborto a como dé lugar en Uruguay.
Los Obispos de Uruguay han expresado en diversas ocasiones su rechazo a la despenalización del aborto, recordando la posibilidad de generar "un proyecto de ley alternativo, que respete y proteja, a la mujer, a la maternidad, a la familia y a la vida del concebido (…) sin eliminar el derecho a la vida del concebido no nacido".
En el año 2008 la Cámara de Diputados aprobó (por 49 votos contra 48) un proyecto de ley que despenalizaba el aborto también hasta la semana 12 de embarazo. En aquella oportunidad, el Presidente y médico de profesión, Tabaré Vásquez, vetó la norma, apoyado por la entonces Ministra de Salud Pública, María Julia Muñoz, y el Ministro del Interior Hector Lescano.