¿qué hacen para paliar los efectos de la crisis los firmantes del manifiesto?
Luis Esquena Romaguera. El manifiesto de los cineastas y cantantes y otras personalidades del mundo de la cultura y de las artes, termina con estas hermosas palabras: “Frente a la soledad, la pobreza y el egoísmo, una respuesta progresista supone apostar por los valores culturales de la solidaridad, que no son ideales utópicos trasnochados, sino la mejor muestra de la dignidad cívica de los sentimientos humanos.” Aunque soy persona sin ninguna relevancia mediática, las suscribo totalmente.
Pero aparte de darlas a conocer, ¿qué hacen para paliar los efectos de la crisis los firmantes del manifiesto? Porque una cosa es predicar y otra dar trigo. Lo único que me consta de estos señores, es que muchos de ellos no rechazan las cuantiosas subvenciones al cine que pagamos con nuestros impuestos o que se benefician de las abusivas cuotas y cánones de la SGAE, que no respetan ni los conciertos benéficos. Quienes sí viven esa cultura de la solidaridad, son entidades como Cáritas y otras instituciones religiosas de la Iglesia Católica, que se dedican a atender a los inmigrantes sin trabajo, a personas necesitadas y dependientes, a los enfermos terminales del SIDA, a los disminuidos psíquicos, etc.
Entidades que no distinguen entre izquierdas ni de derechas, pues atienden a todos con los dos brazos abiertos. Tampoco son progresistas, pues llevan haciendo lo mismo desde hace muchísimos años, aunque no publiquen manifiestos.