El buen tiempo hace algunos meses que nos dejó, pero eso no quita que puedas estar planteándose tener tu propia piscina en casa, para disfrutar del sol y el buen ambiente mientras te das un chapuzón. Además, construir tu propia piscina aporta muchos beneficios, entre ellos: las relaciones familiares, lidiar con el calor, poder hacer deporte, y además aumentará el valor de nuestra vivienda, por si en un futuro decidimos venderla o alquilarla.
Pero antes de tomar esta decisión debemos tener en cuenta muchos factores, por lo que es una decisión que no se debe tomar a la ligera, sobretodo porque es algo que va a requerir de unos trámites legales, así como un buen desembolso de dinero, al fin y al cabo vamos a realizar una pequeña obra para poder tener nuestra preciada piscina. Y es por eso que hoy queremos traeros algunos detalles que debéis tener en cuenta si queréis tener vuestra piscina de construcción.

Primero: pedir presupuestos a varias empresas
Tanto las piscinas de obra como las piscinas prefabricadas son algo que siempre ha existido (quizá éstas últimas tengan menos años de vida), pero bien es cierto que en los últimos tiempos son unas construcciones muy demandadas, por lo que cada vez hay más empresas que tienen a especializarse en este sector, así como a ofrecer muchos servicios a través de internet, y es por esto último que en la actualidad tenemos muchas facilidades para poder pedir presupuesto a varias empresas a fin de ver cuál es la que mejor se adapta a nuestras necesidades y cartera.
Las nuevas tecnologías afectan a todos los campos empresariales, y el de la construcción no iba a ser una excepción, por eso multitud de empresas ofrecen sus servicios tanto presencialmente como en la red, así no tendremos que dar largos viajes y muchas vueltas a fin de visitar varias empresas para obtener varios presupuestos, ahora con internet lo tenemos todo a golpe de clic. Y es por eso, que por ejemplo tenemos empresas como Piscinazos que nos ofrecen a través de su página web la posibilidad de poder solicitar tres presupuestos con un mismo formulario, donde vamos a seleccionar el tipo de piscina que mejor se adapte a nuestras necesidades (ya sea la piscina de obra convencional, SPA, de arena, jacuzzi y entre otros), además cuentan tanto con piscinas de obra de hormigón o con liner y luego es sólo seleccionar unas medidas aproximadas para que el presupuesto sea lo más acertado posible, y listo, en unas horas tendremos varios presupuestos en nuestra bandeja de entrada, así de sencillo. Muchas otras empresas, como hemos dicho, cuentan también con estos servicios en la red a fin de facilitarnos mucho el trabajo de investigación para poder elegir bien la empresa que nos hará nuestra instalación.

Como en cualquier construcción hay unos trámites legales
Una vez tengamos presupuestos, o bien lo podemos hacer antes, pero lo ideal es esperar a tener más o menos claro lo que nos va a costar la construcción de la piscina para proceder a informarnos sobre los trámites legales que debemos seguir o cumplir. Básicamente, lo principal es que al tratarse de una construcción debemos tener los planos de nuestra piscina diseñados y firmados por un arquitecto, eso para empezar. El siguiente paso, sería pedir un pliego de condiciones en el Ayuntamiento de nuestra localidad a fin de saber detalladamente qué requisitos debemos cumplir. Además, debemos tener en cuenta que al tratarse de obra, aunque sea menor, hay que solicitar el permiso de obras, así como si fuera necesario, el permiso de ocupación de vía pública si necesitamos sacar tierra y escombros afuera.

¿Dónde debería ponerla?
​Debemos tener en cuenta el lugar donde se va a ubicar nuestra piscina, y es que también vamos a poderla hacer de interior, y así podremos usarla durante todo el año, pero es algo que debemos decidir bien, una vez hecha no hay vuelta atrás. Por lo que lo principal es que nuestro terreno sea firme y consolidado, para evitar problemas en el futuro y riesgos innecesarios.

Materiales, existen varios tipos
Las piscinas de obra las vamos a podrán ser de diferentes tipos de materiales, aunque los más usados son: hormigón y liner. Seguramente el primero te suene más que el segundo. Las de hormigón requieren mucho más tiempo de construcción, ya que tienden a ser construcciones mucho más resistentes, duraderas y con mejores acabados, ya que construyen con hormigón armado y por tanto requieren mayor tiempo. El liner es cuando el vaso se construye mediante bloques de hormigón prefabricados y se impermeabiliza la piscina con liner de bolsa que la cubrirá en su totalidad, es un método relativamente nuevo, y lo mejor es que se va a adaptar a cualquier terreno y requiere menos tiempo para su construcción ya que los bloques vienen ya hechos. También podemos encontrar vasos de acero y piscinas de poliéster, que son muy sencillas de montar y arreglar, pero la forma del vaso va a venir predefinida por lo que no va a ser a nuestro gusto.
Luego, dentro de lo que es el vaso vamos a poder instalar todo tipo de elementos, desde sumideros, limpiafondos, focos, cascadas, barandillas, escaleras... Así que podremos dejar libre nuestra imaginación y que nuestra piscina luzca con todo lujo de detalles y comodidades.
​
Proceso de construcción, más sencillo de lo que parece
Básicamente la construcción de nuestra piscina va a  seguir una serie de pasos en el orden correcto, al igual que si se construye una casa, es decir, no podemos empezar haciendo el tejado. Lo primero va a ser, una vez tengamos claras las medidas y la profundidad comenzar a excavar el hueco necesario, sacar la tierra y el escombro y comenzar con la armadura de la piscina, así como el proceso de poner los tubos. Lo siguiente será comenzar a poner las paredes y el suelo de la futura piscina con los materiales que hayamos elegido previamente. Y por último la instalación del correspondiente revestimiento, así como proceder a poner los últimos detalles, como los elementos decorativos, así como el sistema de limpieza del agua.