Lo que muchos no saben. Hay reconocidos hasta 47 dialectos del español. desde el madrileño hasta el chilote, el andino o el rioplatense y jergas como el cheli. 
Árbitros
Fernando Ballesteros. 22 de abril. Las cosas han cambiado mucho en los últimos, pongamos, veinte años. Hablo de la prensa deportiva. Recuerdo aquellos tiempos en los que los periódicos catalanes hacían ejercicios de forofismo y los madrileños, más que madrileños, tenían cierta vocación de publicación nacional. ¡Qué lejos queda todo aquello!.
Aquel criticado periodismo del Sport salió triunfante. Su modelo ha sido copiado y, si me apuran, superado por los dos grandes rotativos deportivos de la capital. En los últimos años he leído y escuchado muchas cosas, demasiadas. Estos últimos meses, por no irnos muy lejos, se ha llegado a decir que el Real Madrid no ganará la liga por cuestiones políticas - no se si recuerdan de las cosas que se sostenían hace años por la Ciudad Condal-, se habla con ligereza de villarato e incluso, el Diario de Leticia Sabater, salió la semana pasada con una portada en la que señalaba al Barcelona como campeón por decreto, eso si, con interrogaciones, no nos vayan a buscar las cosquillas.
Y claro, con este panorama, con el Real Madrid que no desiste en su persecución y sintiéndose perjudicado por el árbitro en Getafe, el Barcelona, su presidente, su entrenador, decidió traicionarse a sí mismo en la sala de prensa. Estaban moscas el Pep y Don Joan y pensaron que "quien no llora no mama".
Pues dicho y hecho, gestos airados antes de salir del palco del presidente y protesta aunque "no hablo de los árbitros" del mister. Si, protesta, a pesar de que cuando Pedja hablaba de conjura anti-blanca fue el propio Guardiola el que salió al paso para reconocer que ni merengues ni culés se pueden quejar de los árbitros.
Es humano, yo, posiblemente, también hubiera saltado el sábado pero también demuestra que aquí nadie dice la verdad siempre, que en el fútbol nadie es totalmente coherente. La grandeza de Guardiola, hasta ahora, es que lo parece. Otros, ni eso.