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Diario YA


 

¡Vaya con Calderón!

Fernando Ballesteros. 4 de diciembre. 

Anda revuelto el patio madridista: vuela el Barcelona en la tabla, el equipo no funciona y en la enfermería no cabe nadie más. Bueno y el domingo hay Asamblea, una cita que preocupa y mucho a Ramón Calderón que no está para más volteretas públicas.

No es de extrañar por lo tanto que el mandamal -como diría el clásico- blanco haya tirado de recursos para contentar a la parroquía merengue y el resultado es que Huntelaar ya es jugador del Real Madrid. 

Lo que tiene menos explicación es que se hagan cosas como la que denunciaba ayer "El tirachinas" de la COPE. Resulta que en Ocaña se ha organizado un viaje a Madrid para asistir al partido Real Madrid-Sevilla. Viaje a la capital y partidito en el Bernabeu por la patilla. Eso sí, hay que salir a las siete de la mañana para estar dos horas después en Madrid. Sí se preguntan para qué hay que llegar con tanto tiempo por delante, la respuesta es clara,  primero hay que ir a la Asamblea y aplaudir. Buff, me da vergüenza ajena.

Prefiero hablar de fútbol y opinar que es infinitivo y gratuito. Me quiero referir al nuevo tulipán del Real Madrid para dejar claro que, más allá de recopilaciones de imágenes en Youtube, es un buen jugador y un sensacional rematador. Pero dos aclaraciones: no hay que pedirle más, sólo goles. No ofrece mucha participación y, desde luego, no es un dechado de virtudes con el balón en los piés. La segunda acotación es que habrá que tener algo de paciencia con él. Lo que quiero decir es que un finalizador como él, lo va a tener "en chino" mientras en el Madrid haya tan poquito que finalizar en el área contrario.

Y ya que hablábamos de delanteros pues finalizo yo también hablando de uno muy grande. Si, porque el uruguayo Forlán finaliza pero también asiste y hasta comienza. El domingo en el Calderón el charrúa se bastó y se sobró para desarbolar a un digno Rácing. Él y el Kun están para grandes cosas. Esperemos que a los que mandan en el Calderón no les venza la tentación de hacer caja.

Y nada más, que comienza la cuenta atrás y que en diez días tendremos una nueva edición del partido de nuestras vidas. Hablaremos de él, claro.

 

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