¿Problemas con las cerraduras? Conoce los principales tipos de llaves y cerraduras
Si la cerradura se averió, la llave se partió o simplemente se perdió, lo primero que preguntará el cerrajero es qué tipo de llave o cerradura tienes. Lo bueno es que no se necesita ser especialista en el asunto para saber del tema, aquí te ponemos en contexto con los principales tipos de llaves y cerraduras que existen.
Las puertas están desde que existen los espacios habitables internos, es decir, desde la prehistoria. Las cerraduras, sin embargo, existen desde el Antiguo Egipto, pero en todos los contextos las puertas y sus cerraduras han tenido el fin de brindar seguridad y privacidad a quienes habitan los interiores hasta el presente. Por eso, cuando se daña una cerradura las cosas se complican, pues la privacidad, el confort y la seguridad se interrumpen hasta nuevo aviso.
En ese contexto, toca llamar a cerrajerías que trabajen las 24 horas del día y que sean capaces de abrir o cerrar puertas con urgencia, como es el caso de https://www.cerrajerosvalencia.es/. Pero antes que nada es importante (aunque no fundamental) saber qué tipo de cerradura y llave tiene tu espacio.
Tipos de llaves más comunes
La llave de sierra o serreta es la más común. Está en todas partes.
La llave de seguridad es la que corresponde generalmente a las puertas blindadas. La puedes identificar porque los bordes son rectos y en sus caras tienen hendiduras.
La llave de paleta o paletón es común en las puertas blindadas, es la que tiene una espiga cilíndrica y terminan en una parte plana con dientes rectangulares.
La llave clásica es la que se ha mantenido en el tiempo. Es la clásica llave hecha de hierro que cierra establos, áticos y más, y que en la antigüedad era usada para todo.
Otras llaves un poco menos comunes son las de pompa y las cruciformes. Ambas son muy resistentes y difíciles de averiar, pero si fuera el caso no es algo que puedas solucionar por ti mismo, es mejor llamar a especialistas en puertas como cerrajeros Alcoy, presentes en gran parte del territorio español.
Tipos de cerraduras más comunes
La de bombillo es la más común porque precisamente va en conjunto con la llave de sierra.
Otras que funcionan con llave de cierre son las cerraduras con doble pestillo y las de dos vueltas, entre otras.
La cerradura de molinillo, por su lado, es un clásico, y como tal suele ir acompañada por la hendidura debajo del palastro para la llave clásica.
La cerradura vuelta y media está muy presente en los hogares y en las oficinas. Es la que primero actúa como llave y luego como picaporte.
En ese contexto también está la cerradura de llave de pezón, que se puede abrir por dentro y por fuera.
A parte de estas cerraduras comunes, ahora son cada vez más utilizadas las cerraduras combinación (que incluyen un teclado) y las computadas, que funcionan con llaves que tienen pequeñas perforaciones circulares con sistema de magnetismo. Estas últimas están compitiendo dentro de los conjuntos residenciales y empresariales, por quitarle el puesto a la popular llave de sierra.
¿Cómo prevenir el daño de cerraduras?
A veces la avería nos coge por sorpresa, pero otras tantas veces el fallo es producto de un mal mantenimiento. Es importante aclarar que siempre es necesario consultar con un especialista, pues cada tipo de cerradura requiere un cuidado específico. No obstante, aquí traemos algunos consejos.
Lubricar la cerradura (sobre todo en invierno) es fundamental para evitar daños. El grafito es un lubricante efectivo y práctico que se puede aplicar en bisagras y engranajes. Un especialista puede recomendar también aerosoles específicos para la lubricación, pero lo clásico siempre será acudir a los aceites y a la vaselina.
Un truco muy sencillo que tal vez no conozcas es pintar con la mina del lápiz de grafito los dientes de la llave e introducirla en la cerradura. De esta manera no solo se le hace mantenimiento a la cerradura, sino que si hay un atasco leve se puede solucionar sin problema.