Un disco duro multimedia es un aparato que tiene capacidad para reproducir contenido audiovisual, como puede ser un vídeo, música, imágenes, así como otros recursos. Se conecta a un dispositivo compatible, por lo general una TV o un monitor, se interactúa con un menú y en cuestión de segundos ya puedes tener el archivo multimedia reproduciéndose.

Como existen muchos modelos de discos multimedia en el mercado, es importante saber en qué nos tenemos que basar a la hora de elegir el mejor modelo. Y con el objetivo de ayudarte, hemos hecho un completo estudio que te va a venir a la perfección:

Estudio de los criterios a evaluar para comprar un disco duro multimedia

Capacidad

De la misma manera que a la hora de comparar un disco duro tradicional, con un disco duro multimedia es imperativo estudiar la capacidad que lleva. La mayoría de los modelos tienen una capacidad de 500GB (el equivalente a 1/2TB), a 1TB o, a 2TB, aunque ahora están empezando a salir modelos de gran capacidad, de hasta 3TB.

Los estándares de calidad también evolucionan, encontrándonos contenidos que pueden llegar a alcanzar perfectamente los 50-100GB a día de hoy. De esta manera, vale la pena que compremos un modelo de gran calidad, que esté preparado para aguantar lo que va a venir.

Velocidad de acceso

Los discos duros multimedia se conectan a través de tipología USB, en este punto encontramos dos estándares: 2.0 y 3.0. A poder ser, te recomendamos que apuestes por un disco duro multimedia que tenga conexión 3.0. Y esto tiene su sentido, ya que son los más rápidos.

Si tenemos que reproducir una película de 100GB con un disco con conexión 2.0, podemos tener importantes problemas de ralentizaciones.

Compatibilidad con S.O

En cuanto a compatibilidad no suele haber mucho problema, aunque nunca está de más echar un vistazo por si acaso. Algunos modelos tan sólo son compatibles con Windows, mientras que otros también lo son con Unix o con MAC.

¿Conexión a Internet?

Algunos modelos no requieren que estemos cargando directamente los contenidos a través de otro soporte, sino que se nutren de una conexión a la red (bien de datos, o bien mediante tecnología WiFi) para conseguirlos. O descargamos estos contenidos en la memoria interna, o hasta hay algunos modelos que tienen la capacidad para reproducirlos en streaming.

Relación entre calidad y precio

Además de todo lo anterior, deberíamos echar un vistazo a la marca que ha diseñado el disco duro, sobre todo a su trayectoria, para hacernos una idea de si nos va a durar, o si bien vamos a tener algún que otro problema a la primera de cambio.

El precio es muy variable, pudiendo encontrar en el mercado algunos modelos a partir de los 20€, mientras que otros pueden sobrepasar los 200€.

Estudiando estos criterios nos será más fácil elegir el disco multimedia que más se adapte a nuestras necesidades.