10 niños españoles entre los 26 heridos
Un total de diez niños de las 26 personas que resultaron heridas leves anoche cuando un avión de la compañía aérea Ryanair con destino a Girona aterrizó de urgencia en el aeropuerto de la ciudad francesa de Limoges, situada en el céntrico departamento de Alto Vienne, por un fallo técnico, son españoles.
Otros 8 ciudadanos españoles, todos ellos adultos, fueron atendidos en un centro hospitalario tras el accidente, según informaron a Europa Press fuentes médicas de la ciudad de Limoges.
La aeronave, modelo 737 de Boeing, cubría la ruta entre las ciudades Bristol y Girona. A mitad de vuelo, el avión sufrió una despresurización, lo que obligó al piloto a descender súbitamente a una altura en la que la presión era aceptable para el pasaje. Éste se vio obligado a hacer uso de las máscaras de oxígeno del avión.
El aparato descendió en sólo cinco minutos, de 10.000 metros de altura a 2.000. El cambio de 8.000 metros de altura causó heridas leves en los tímpanos de 26 de los viajeros. La mayoría de los pasajeros, un total de 176 personas, eran británicos. Sin embargo, había una treintena de españoles a bordo del avión.
Entre los heridos leves se encontraban nueve niños miembros de un grupo de 17 jóvenes que habían realizado un viaje para estudiar inglés con la Fundació Joan Riera i Gubau, según confirmaron a Europa Press fuentes del Ayuntamiento de Santa Coloma de Farners (Gerona).
Los nueve pasaron un "reconocimiento médico auricular" en la Clínica Chénieux de Limoges, según informaron a Europa Press fuentes del centro hospitalario. Los responsables de la clínica afirmaron que los pasajeros atendidos estaban visiblemente afectados "psicológicamente" por lo vivido.
"Su estado de salud exigía una observación suplementaria de algunas horas", confirmó a Europa Press René Nury, portavoz de la prefectura de Limoges. "Viajarán con un acompañante hasta Gerona en un autobús que saldrá de Limoges a las 12.00 horas", precisó Nury.
Los otros 8 niños del grupo viajaron con el total de 125 de los pasajeros que ya han llegado a su destino después de que Ryanair fletara otro avión para desplazarlos desde el aeropuerto de Limoges hasta el de Gerona-Costa Brava, donde aterrizaron a las 4.18 horas, según confirmaron a Europa Press fuentes de Aena.
Por su parte, el Centro Hospitalario Universitario (CHU) de la ciudad de Limoges informó a Europa Press de que otros nueve españoles, "un menor y 8 adultos" fueron atendidos por problemas de audición en las instalaciones del CHU. Las nueve personas abandonaron esta mañana el hospital de que este mediodía los viajeros tenían previsto continuar con su viaje.
DESPRESURIZACIÓN A LA ALTURA DE BERGERAC.
Esta mañana, Jean-Pierre Limusin, presidente de la Cámara de Comercio e Industria de Limoges y gestor del aeropuerto internacional de esa ciudad, aclaró las circunstancias de la despresurización en una entrevista a la radio pública francesa, 'France-Info'.
"Estando a la altura de Bergerac", ciudad situada a unos 200 kilómetros al sur de Limoges, "a 36 000 pies de altitud, el avión sufrió una despresurización repentina", dijo. Según explicó Limusin "las máscaras de oxígeno se descolgaron y el piloto aplicó las medidas" establecidas por el protocolo. "Descendió rápidamente a una altitud en la que la seguridad de los pasajeros estaba garantizada", añadió.
"No hubo puertas arrancadas ni ventanillas que hayan explotado", mantuvo en alusión a otros posibles motivos de despresurización. Ello facilitó "que las maniobras se efectuaran en calma" y "luego, el avión pudo tomar tierra en unas condiciones totalmente normales, precisó.
Para el gestor el aeropuerto internacional de Limoges, lo ocurrido en el Boeing 737 de Ryanair es un "fenómeno raro" en la aviación para el que "no hay explicación técnica posible". Pese a ello, los "pilotos del avión han permanecido" en el aeropuerto "para participar en los trabajos que permitan determinar las causas de la avería", aclaró.
Sobre los 26 heridos leves, Limusin consideró que el término "heridos" es muy fuerte porque han "sido muy ligeramente heridos". Además, los servicios de urgencia del aeropuerto los han "examinado uno a uno", dijo, para confirmar que podían retomar el avión que salió de Limoges a las "3.30 de esta madrugada", según precisó a Europa Press la prefectura de la ciudad francesa.
"No era cuestión de hacer que los pasajeros pasen nuevos riesgos exponiéndoles" inmediatamente después de lo ocurrido a "variaciones de presión como ocurre en los despegues y los aterrizajes", concluyó.