Redacción Madrid. 1 de abril.
La Guardia Civil ha desarticulado una organización que estaba especializada en robo de calderas, radiadores y otros elementos de viviendas que se encontraban en construcción. En total han sido detenidas veinte personas, de las que dieciséis son de origen rumano, tres moldavos y un ruso.
La organización había actuado en viviendas en construcción en Zamora, Guadalajara, Salamanca, Albacete, Toledo, Madrid, Ciudad Real, Valladolid y Segovia. Los objetos sustraídos eran enviados a Rumania mediante empresas ilegales de transportes internacionales, algunos de cuyos responsables igualmente eran integrantes de la red.
Entre los efectos intervenidos -que hubo que trasladar en cuatro camiones- se encuentran 190 calderas, 1.219 radiadores, 21 hornos, 100 grifos, 18 vitrocerámicas, 8 televisores, 11 ordenadores y más de 20.000 euros.
La operación, denominada "Barro", se inició cuando la Guardia Civil detectó a finales del pasado año un importante aumento de robos de calderas de calefacción, radiadores, hornos y vitrocerámicas, en viviendas en construcción próximas a su entrega. La investigación constató que los integrantes de la organización residían en viviendas de alquiler en diversos puntos de la Comunidad de Madrid.
Tras localizar los puntos donde iban a cometer los robos, varios componentes de la red se desplazaban hacia el lugar en vehículos adquiridos de segunda mano que inscribían a nombre de mujeres de nacionalidad rumana sin relación alguna con los integrantes. Seguidamente, tras adoptar diversas medidas de seguridad para no ser detectados, se introducían en las obras y se apoderaban de las calderas de calefacción, radiadores, vitrocerámicas, hornos, grifería, etc. Si el material estaba ya instalado, lo desmontaban.
Una vez cometidos los robos, la mercancía era trasladada a los almacenes y domicilios de los integrantes. Posteriormente, contactaban con tres receptadores, a los que se les ofrecía el material y a modo de subasta se lo adjudicaban al mejor postor.
En otras ocasiones eran los receptadores los que solicitaban a los encargados los robos los elementos térmicos, indicándoles la cantidad, marca y modelos que necesitaban.
Los detenidos actuaban tres o cuatro noches por semana y cada noche podían llevar a cabo entre tres y cuatro robos en diferentes puntos.
En la Urbanización Residencial "Polvoranca" de la localidad de Leganés (Madrid) se cometieron 41 robos en chalets, donde se apropiaron en una sola noche de 41 calderas de calefacción, 200 radiadores, 29 vitrocerámicas y 29 hornos.
Tras los robos, utilizaban diversas empresas clandestinas de transportes de mercancías a través de las cuales enviaban los objetos a Rumania y otros países del este de Europa.
En la operación se han practicado 9 registros en viviendas y almacenes de las localidades de Parla, Fuenlabrada, Móstoles, Torrejón de Ardoz, Coslada, todas ellas de la Comunidad de Madrid, así como 1 en Madrid capital. Las investigaciones están dirigidas por el Juzgado de Instrucción núm. 2 de Zamora.