Daniel Ponce Alegre. Teólogo y Antropólogo. Delegado en Levante de Diplomacia S.XXI. El próximo día 9 de Mayo se conmemora en Rusia, y en diferentes ciudades alrededor del mundo por parte de las comunidades rusas, el " Día de la Gran Victoria de la Humanidad sobre el Fascismo ".
En dicha conmemoración se atribuye la victoria a la URSS: Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas, obviando que dicho " constructo socio-político " tenía escasamente 20 años en el momento de la II Guerra Mundial, frente a los mil de la historia de Rusia, y que fue creado, mantenido y desarrollado a la fuerza, mediante la sangre, y a base del exterminio de no sólo una familia completa, como fue la del Zar Nicolás II, sino el de millones de rusos que por el hecho de tener propiedades, generar riquezas propias, ser nobles o ser cristianos merecían morir.
Sin entrar en las profundidades diplomáticas del momento ni en los juegos de intereses creados por algunos países y algunas comunidades judías y cristianas en varios de esos países con Hitler y con Stalin, pues me ocuparía mucho tiempo explicarlo con detenimiento y exactitud, sí que debo decir que la llamada " victoria " no fue ni mucho menos tal pues en escasamente menos de 10 años de acabar la II Guerra Mundial, y la supuesta victoria, ya se estaba en otro conflicto con formato diferente, pero de causa igual: el socialismo y su internacional socialista.
Del nacionalsocialismo alemán e italiano, se pasó al marxismo socialista de la Rusia de principios del S.XX, siendo en ambos casos el denominador común la ausencia total de Dios y de la Verdad de Cristo, siendo los cristianos el objetivo de dichos regímenes dictatoriales totalitarios a lo largo de la historia, que se calcula que han eliminado en todo el mundo alrededor de 100.000.000 de personas en los diferentes regímenes en los que se ha implantado dicha ideología satánica como lo es ahora también.
Es de justicia recordar que la España del General Franco conocía los efectos posibles del comunismo y de que España se convirtiese en un satélite de la URSS, motivo por el cual se convocó de forma voluntaria a los militares que formaron la División Azul, como prueba visible del convencimiento de que se debía luchar contra el comunismo ateo como principal prioridad, encontrándose tras él en muchos casos una real vinculación judeomasónica.
Recordemos estos sucesos de la historia que algunos ideólogos gubernamentales y creadores de opinión quieren que olvidemos pues ello les permite repetir el mismo " modus operandi " en la actualidad con el conflicto en Ucrania y en otros lugares propiciado por la ONU, y con el islamofascismo yihadista o la judeomasonería tras la ideología de género y de planificación demográfica.
No permitamos que los árboles de los conflictos nos impidan ver el bosque que se está creando desde hace años de forma artificial, como se creó de forma artificial la URSS con un fin determinado, siendo en la actualidad el " constructo " creado aún mayor y más asesino y exterminador de cristianos como lo vemos todos los días en TV no sólo con los islamistas sino también con los programas de adopción de homosexuales, bodas entre ellos, " familias " formadas por diferentes miembros del mismo sexo y esterilizaciones sistemáticas de mujeres en África organizadas por ONU.
La victoria no se produjo, ni mucho menos como se ha visto, pero se producirá aún por encima de nuestras intenciones gracias a Dios y al Hijo Unigénito, Jesucristo. Amén.