Ángel R. Boya Balet. A la izquierda se llega por múltiples caminos, pero hay dos especialmente relevantes que siendo esencialmente distintos coinciden en buena parte de los casos: el nivel cultural y el nivel de desarraigo de las personas.

Si se estratificara la población de cualquier territorio, por sus diferentes niveles de ignorancia/cultura se comprobaría que en la capa de mayor ignorancia del 90% al 99% de los integrantes de esa capa declaran ser votantes de izquierda. El porcentaje se va reduciendo conforme el nivel de ignorancia va disminuyendo, de modo que en la capa social correspondiente al mayor nivel cultural o de menor ignorancia el porcentaje de votantes de izquierda se reduce hasta al mínimo.

En relación con lo anterior cuanto menos se auto-informan los miembros de un grupo, es decir, cuanto menos leen y estudian, más necesitados están de que se “les informe y se les forme”, es decir que se les adoctrine y más propensos son a repetir y a recibir mensajes, consignas, eslóganes que por otra parte son incapaces de analizar.

Del mismo modo el desarraigo, creado por las posibles frustraciones individuales y/o colectivas desde las económicas hasta la inmensa gama de frustraciones psicológicas o motivacionales, se traduce en un posicionamiento favorable a la destrucción de lo existente y a las posiciones antisistema.

Por ello la izquierda ha buscado, (aparentando lo contrario) llegar al actual nivel de fracaso educativo con las cuatro leyes General de Educación que ha promulgado desde la Transición, porque cuanto más ignorante es un grupo más receptivo es a los eslóganes simplistas, los que ella emite.

Por el primero de estos caminos se facilita la aceptación de mensajes fáciles de asimilar, por el segundo y a través de la rabia se manifiesta el afán de destrucción de las normas y estructura sociales, propio de las personas frustradas. Y por el efecto conjunto de ambos caminos llega a la conclusión de que el poder le corresponde en exclusiva, puesto que se deslegitimiza todo poder existente. De ahí la pretendida superioridad moral de la izquierda. Superioridad moral que le permite pisotear los valores humanos y legitimizar toda corrupción pues “la izquierda es el único gobierno legítimo de las naciones”.

¿Cuáles son esos mensajes y qué pretenden?
Básicamente son tres: la implantación de la justicia social, el desarrollo del progreso y establecer la sociedad sin clases.

En escasos 80 años del pasado siglo XX en nombre del socialismo y de LA JUSTICIA SOCIAL se ha asesinado a más de 110 millones de personas en diversos países del planeta Tierra .

Por el PROGRESO se pretende suprimir todos los límites que la Ley natural impone a la acción humana: El bien y la verdad dejan de tener categoría universal, para convertirse en el resultado de un pacto o de una votación y por lo tanto susceptibles de variación.

Por ello se destroza la familia , la patria y la religión . Suprimiendo los principios y estableciendo como aceptable lo absurdo, lo inmoral, se deja al hombre indefenso, y obligado a aceptar cualquier situación que los que mandan impongan. Se priva al hombre de todo mecanismo que le permita defenderse de lo que dicta el gran hermano, como describió George Orwell. En España no hemos llegado todavía a ese Estado totalitario, pero caminamos en esa dirección , aunque los medios y las organizaciones políticas tratan de disimularlo.

Con el objetivo de una SOCIEDAD SIN CLASES lo que en realidad se busca es una sociedad con dos clases: la de los acomodados funcionarios del partido de un lado y la arruinada inmensa mayoría de la población de otro, lo que ya consiguieron en la antigua URSS y en las repúblicas del Pacto de Varsovia, en China, Cuba y otros sitios, como bien expuso Milovan Djilas en “La Nueva Clase” que le valió la cárcel en el paraíso comunista yugoeslavo.

Este objetivo de la sociedad sin clases es compartido por los partidos socialdemócratas y está inspirado por la masonería dueña y señora de partidos políticos, sindicatos y en general de las instituciones en las que haya algo de poder. La sociedad sin clases avanza a través de la destrucción de la clase media. En España ya existen dos millones de familias que no tienen ingreso alguno.

¿Y el Partido Popular?
Es otro partido socialdemócrata coincidente en sus objetivos y medios con el PSOE , al que le toca ratificar todas las iniciativas del PSOE además de ser el malo de la película .

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1 Como acreditan desde hace años los sucesivos informes PISA.
2 Cuyo leit motiv es: “quitar a los ricos para dar a los pobres” y una de cuyas variantes más conocida es:“los empresarios son malos y los obreros, buenos”
3 20 millones en URSS (Lenin y Stalin) 65 millones en China (Mao-Tse-Tung), 1millón en Vietnam (Ho-Chi-Min) 6 millones en Alemania (Hitler) 2 millones en Camboya (Pol-Pot), Cuba, Nicaragua, Afganistán, África etc. etc.
4 Se potencia el divorcio exprés, el matrimonio homosexual, la supresión del matrimonio como requisito de convivencia, etc.
5 ZP: “La nación es algo discutido y discutible”. Se desmiembra España: pactos con ETA, Estatut catalán. La bandera de la Patria es un trapo pintado, no así las de los sindicatos. Se alientan los movimientos independentistas.
6 Se agrede a las manifestaciones religiosas. Se promueve inmoralidad en las costumbres y el desprestigio de la autoridad en la familia y en la escuela.
7 España no es una democracia por la sencilla razón de que dos únicas personas Rajoy y Rubalcaba designan a los miembros del poder legislativo, del Ejecutivo y del judicial. ¿Concentró alguna vez el general Franco tanto poder?
8 Los partidos socialistas ya no existen más que de nombre. Los partidos socialistas pretendían la implantación de la sociedad sin clases de forma violenta. Su implantación gradual es el objetivo de los partidos socialdemócratas.
9 La masonería no es sino el camuflaje del sionismo para implantar el gobierno mundial sionista a un mundo no judío.