Apoyo al Día Mundial del Riñón
- Pesarse dos veces al día, una por la mañana al levantarse y otra por la noche al acostarse, es una buena herramienta de control para no aumentar en exceso de peso. No es recomendable aumentar más de 1 kg. al día.
- Reducir la cantidad que se bebe en cada ocasión o reducir el número de veces que se bebe.
- El agua de las verduras es inevitable, pero disminuye si se saltean después de hervirlas, además de estar más sabrosas.
- El pan tostado tiene una tercera parte de agua que el pan tierno.
- Mantenerse lo más activo y entretenido posible, evita pensar tanto en la sed.
- Es importante diferenciar la sensación de sed, con otras sensaciones como boca pastosa o sequedad.
- Utilizar una botella con una medida justa, de medio litro por ejemplo, y beber siempre con sorbos pequeños para saciar la sed sin utilizar excesivas cantidades.
- Humedecer los labios y boca con una toalla húmeda, puede ser a veces suficiente.
- Respirar con la boca cerrada. El aire reseca la boca y garganta aumentando la sensación de sed.
- Evitar exponerse al sol y el calor, ya que necesitará ingerir agua o una bebida refrescante.
- Usar ropa de algodón, evitando la ropa sintética que aumenta el sudor.
- Evitar alimentos que producen sequedad y sensación de sed.
- El ejercicio físico moderado reducirá la ansiedad y la necesidad de beber.
- Aprovechar el vaso de agua de la comida o la cena para tomar la medicación.
- Modificar hábitos como tomar café a media mañana.
Todas estas pautas son utilizadas diariamente por las personas que padecen alguna enfermedad renal. Los que no las padecemos podemos ayudarles nos, como titula este año el Día Mundial del Riñón, la posibilidad de donar nuestros riñones cuando ya no los necesitemos. El trasplante es la gran solución para superar estas enfermedades.