Juan Rodríguez. Este año la Asamblea de las naciones de Kazajstán (ANK) celebra su veinteno aniversario. Creado como el instituto de consultas y reuniones bajo la vigilancia del presidente, hoy día ANK se ha convertido en una herramienta social para reunir a los diferentes institutos sociales del país.
Kazajstán es el primer país del CEI que prestó su atención a la creación de un instituto único que tratara de las relaciones entre las nacionalidades. El presidente Nursultan Nazarbayev, siendo el arquitecto del modelo kazajo del equilibrio entre las confesiones y étneos, vuelve a repetir que donde hay harmonía, hay bienestar. En un hogar donde hay paz  y tranquilidad, siempre será unidad y comprensión mutua.
La exitosa experiencia de la política interétnica de Kazajstán fue valorada por parte de la comunidad internacional provocando el interés en los países con semejante populación multiétnica. Por ejemplo, en Londres existe el centro kazajo de la paz y harmonía que presenta un modelo único de la tolerancia interétnica y harmonía social. Las publicaciones “Kazajstán: un molde integral de unidad y harmonía” fueron traducidos en idiomas europeos.
Es verdad que Kazajstán es una de pocas repúblicas ex soviéticas que puede alardear de su estabilidad. El país nunca ha sufrido ningún tipo de manifestaciones por las razones étnicas o religiosas.
Los observadores internacionales admiten que las autoridades del país encabezadas por el presidente han conseguido realizar una política que permite promover activamente la idea de construir un estado laico, moderno y competitivo. Kazajstán se ha convertido en una plataforma de llevar a cabo un dialogo intercultural de las civilizaciones con el objetivo de aproximar los conceptos entre el Occidente y Oriente en las cuestiones claves del mundo de hoy.
La contribución de la Asamblea fue valorada en los mayores niveles. En aquel momento el secretario general de la ONU Kofi Annan después de su visita a Kazajstán lo nombró el país ejemplar para los demás por su harmonía internacional, la estabilidad, el desarrollo sostenible. El Papa Juan Pablo II hizo elogios al pueblo kazajo durante su visita a Kazajstán en 2001.
Sin embargo, los esfuerzos no se acabaron ahí, se ha cambiado drásticamente el papel de todo poder representativo. Uno de los cambios más importantes de la reforma constitucional era el aumento de los deputados de Cámara Baja del Parlamento (Mazhilis). Hoy los nueve deputados se eligen desde la Asamblea. Fue adoptado el documento conceptual – la Doctrina de la unidad nacional con los objetivos, tareas, principios de la política nacional.
Kazajstán, en cuyo territorio coexisten en paz los representantes de unas 130 nacionalidades, tres mil uniones religiosas que representan a más de 40 confesiones, sirve como una plataforma ideal de dialogo. En los últimos dos décadas en el país fueron creados 22 centros nacionales de cultura en niveles tanto republicano como regional que reúnen a los 470 organizaciones diferentes.
En Kazajstán hay más de 100 colegios nacionales, 170 escuelas de los domingos donde se enseñan 23 idiomas natales. En tres colegios del renacimiento nacional funcionan 29 sucursales de enseñanza de 12 idiomas natales. Las fiestas tradicionales como Nauruz, Maslenitca, Sabantuy, Pascua de Navidad se celebran cada año.
La Asamblea de las naciones de Kazajstán estableció una estrecha colaboración con las organizaciones internacionales e institutos de los estados extranjeros. Con la ayuda de OSCE fue creado el Centro de las investigaciones humanitarias para estudiar los problemas de las relaciones internacionales.
Se extienden y fortalecen las relaciones internacionales entre los centros nacionales y culturales con los países de origen. Este proceso es más activo en las diásporas azerbaiyana, armenia, griega, dungan, judía, karachay-balkar, coreana, alemán, polaca, tatar, turca, turkmena y  ucraniana. Se producen los contactos con las regiones de Rusia en la frontera con Kazajstán.
Hay algo más muy importante. En Astana, que se ha convertido en el centro de la cultura y espiritualidad, los representantes de todas las confesiones mundiales se reunían cuatro veces y encontraron la decisión a algunos problemas vitales. Este año será la quinta vez que Kazajstán organiza el Congreso de los líderes de las religiones tradicionales y mundiales.
La fecha de la celebración del V Congreso es el 10 y 11 de junio. El tema principal de la reunión será el dialogo de los líderes religiosos y los políticos en nombre de paz y desarrollo. Entre los participantes del foro – los representantes de las religiones tradicionales – el cristianismo, islam, judaísmo, budismo, daosismo, sintoísmo, hinduismo, y también de las organizaciones internacionales. El primer Congreso fue celebrado en Astana en septiembre de 2003 y sus participantes fueron los líderes religiosos y los invitados honorarios desde los 13 países de Europa, Asia, Africa y Oriente Medio. El Congreso se lleva a cabo una vez en tres años.
En contexto de la actual situación tensa en distintas regiones del mundo, cuando existen los conflictos armados y algunos grupos y organizaciones intentan iniciar nuevos desafíos de la civilización, el dialogo entre los líderes de las religiones mundiales obtiene mucha importancia. Es la hora a encontrar la receta de un modelo optimo de la cooperación de las jerarquías religiosas y líderes políticos para la paz estable y harmonía en nuestra planeta.
Hay que lograr que la gente no iguale el terrorismo y la religión. Es importante demostrar las cosas que son posibles - coexistencia pacífica de los representantes de distintas religiones, creencias y fe. Es importante que las personas que han sido involucradas fraudulentamente en la actividad de terrorismo y extremismo entiendan el significativo del dialogo y valor de la vida humana. Y aquí es imprescindible que la voz de los líderes religiosos no suene  menos que la de los líderes políticos.