Redacción Madrid. 3 de enero. 

   La incidencia del virus de la gripe en España prácticamente se ha duplicado en las últimas semanas ya que, según los últimos datos de la Red Nacional de Vigilancia Epidemiológica del Instituto de Salud Carlos III, en la semana del 21 al 27 de diciembre se registraron 148,18 casos por cada 100.000 habitantes, frente a los 70,48 casos registrados a mediados del mismo mes, del 7 al 13 de noviembre.

   La actividad gripal ya sufrió un mayor ascenso en la semana anterior previa a las fiestas navideñas, del 14 al 20 de diciembre, cuando se alcanzó una media de 129,16 casos por cada 100.000 habitantes, que ahora se generaliza en todas las comunidades autónomas, sobre todo en el centro y norte peninsular.

   De este modo, las regiones más castigadas por el virus han sido Navarra (296 casos por cada 100.000 habitantes), Castilla y León (280,53), Canarias (279,93), País Vasco (253,07), Cantabria (207,5) y Comunidad de Madrid (169,93), todas ellas superando los 100 afectados por cada 100.000 habitantes, seguidas de Cataluña (96,07), Extremadura (80,72) y La Rioja (79,68).

   En el polo opuesto se encuentran Baleares (14,37), Comunidad Valenciana (26,2), Castilla-La Mancha (44,11), Aragón (60,51) y Andalucía (68,43), mientras que de Galicia, Murcia, Ceuta, Melilla y Asturias no hay datos disponibles. Precisamente el Principado fue la comunidad más castigada por la gripe en la semana previa a las fiestas de Navidad, con 444.59 casos por 100.000 habitantes.

   En la distribución por grupos de edad, los menores de 15 años siguen siendo los más afectados la enfermedad, mientras se sigue registrando una tendencia creciente en las tasas de incidencia de gripe en adultos jóvenes de 15 a 65 años y, aunque menos evidente, también en los mayores de 65 años.

   Además, en la citada semana --del 21 al 27 de diciembre-- se señalan 18 aislamientos de virus de la gripe en vacunados, 3 en niños de 1 a 4 años, 2 en niños de 5 a 14 años, 3 en el grupo de 25 a 44 años, 4 en el grupo de 45 a 64 años, 2 en el grupo de 65 a 74 años y 4 en el grupo de más de 74 años.

UN VIRUS "CONDICIONADO POR LAS BAJAS TEMPERATURAS"

   Este aumento de la incidencia de la gripe se debe al fuerte temporal de frío vivido en diciembre ya que "el virus está condicionado por las bajas temperaturas", explicó en declaraciones a Europa Press la coordinadora del Área de enfermedades infecciosas de la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR), Rosario Menéndez.

   No obstante, la mayor frecuencia de casos comienza a darse a partir de estas fechas, y de hecho, a partir de enero puede que se alcancen cifras superiores a los 100 casos por cada 100.000 habitantes en todas las comunidades siendo "más extremas en la zona norte y las comunidades más frías", aseveró Menéndez.

   De hecho, la consellera catalana de Salud, Marina Geli, ya ha alertado de que en la próxima semana se incrementarán los casos de gripe en Cataluña después de que en los últimos días se haya registrado más actividad en las urgencias pediátricas. "Estamos en epidemia de virus respiratorios, aunque no en epidemia desde el punto de vista de virus circulante de gripe", matizó.

   Al mismo respecto se ha referido su homólogo valenciano, Manuel Cervera, pidiendo a la población de riesgo a que acudan a vacunarse dado que el virus "puede ser más virulento" y porque la vacunación "es el acto sanitario con la relación coste-beneficio que mayor ventaja reporta al ciudadano".

   El Ministerio de Sanidad y Consumo recomienda la vacuna antigripal a los mayores de 65 años de edad, a los profesionales dedicados a la sanidad y a otros grupos de riesgo, como el de las embarazadas, los enfermos crónicos, los niños mayores de seis meses, para prevenir la enfermedad y evitar "complicaciones más graves".

   Las campañas contra la gripe en cada comunidad autónoma lo fija la correspondiente consejería de Sanidad, responsable de organizar la distribución y aplicación de las vacunas, que se administran en los centros de salud y son gratuitas para todos los grupos de riesgos. Para esta temporada, la vacuna trivalente antigripal recomendada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) para el hemisferio norte contiene las cepas análogas a A/Brisbane/59/2007 (H1N1), A/Brisbane/10/2007 (H3N29 y B/Florida/4/2006.

LAVARSE LAS MANOS, ESTORNUDAR EN UN PAÑUELO Y NADA DE ANTIBIÓTICOS.  

   Además, para evitar su transmisión, Sanidad recuerda la importancia de taparse la boca al toser o al estornudar, preferentemente con pañuelos desechables; lavarse frecuentemente las manos, sobre todo después de haber tosido o estornudado y evitar reutilizar pañuelos empleados al estornudar o limpiarse las secreciones nasales.

   El tratamiento de la gripe se basa en tomar ciertas medidas para aliviar los síntomas, tales como descansar, beber agua y zumos en abundancia o tomar antitérmicos, siempre que no tengan contraindicaciones.

   Del mismo modo, Sanidad advierte de la falta de efectividad de los antibióticos, ya que no acortan la duración de la enfermedad y no tienen ninguna efectividad. "El uso adecuado de antibióticos es clave", asegura el director general de Salud Pública del Ministerio, Ildefonso Hernández, y, por ello, "no para todos los catarros y mucho menos para cualquier enfermedad vírica como es la gripe se puede utilizar antibióticos, a no ser que estén recomendados por los servicios sanitarios".