El ayuntamiento de Belchite conmemora el 80 aniversario de su Batalla homenajeando a los vecinos supervivientes pero omite decir quién produjo la matanza cuando la ciudad fue asesiada por las fuerzas republicanas. En todo el comunicado no lo menciona ni una vez. Este es:  

- Los días 1 y 2 de septiembre, Belchite conmemora los 80 años de su Batalla, episodio clave de la Guerra Civil, con “Belchite: memoria y paz”: una cita con la paz, la concordia y los supervivientes cargada de simbolismo - El programa de actividades incluye artes escénicas, poesía, danza y conciertos de música, en el simbólico marco de las ruinas del Pueblo Viejo - El Pueblo Viejo puede ser visitado en grupos guiados por descendientes de los propios vecinos, que reconstruyen los trece tristes e intensos días de batalla basándose en las historias personales de los supervivientes y documentación oficial de ambos ejércitos.

  Ochenta años han pasado desde la Batalla de Belchite, uno de los episodios  más cruentos de la Guerra Civil, en el que fallecieron casi 6.000 personas, entre civiles y militares. Ochenta años después, los supervivientes serán homenajeados con “Belchite: memoria y paz”, un evento conmemorativo de dos días que quiere ser un recuerdo a los vecinos que vivieron y sobrevivieron a aquellos días históricos (actualmente hay 180 supervivientes censados en el pueblo). Y un encuentro por la paz, en un espacio cargado de simbolismo, testimonio perenne de la dura batalla y de la naturaleza cruel y destructora de la guerra en cualquier parte del mundo.  

La Batalla de Belchite

  La Batalla de Belchite tuvo lugar entre el 24 de agosto y el 6 de septiembre de 1937. A sólo 50 kilómetros de Zaragoza, Belchite era un enclave estratégico, además de una ciudad con porte y elegancia, que se reflejaba en sus calles y edificios, de gran riqueza arquitectónica. Entre ellas, tres iglesias, un convento y un importante seminario, exponente del clásico mudéjar aragonés.   El pueblo contaba entonces con 3.800 habitantes y 1.200 casas. En apenas 13 días, la batalla se cobró 6.000 víctimas y dejó el pueblo en ruinas. Siete meses después, Belchite volvió a ser tomado, otra vez con un balance muy negativo. Poco a poco los vecinos supervivientes lo fueron abandonando hasta quedar desierto y en ruinas, siendo el nuevo Belchite construido al lado.   Actualmente, las ruinas del Pueblo Viejo están abiertas al público, que puede descubrir a través de visitas guiadas cómo era Belchite, su vida, sus gentes… Descendientes de los propios vecinos que lo habitaron se encargan de explicar lo que ocurrió, basándose en los testimonios de primera mano de supervivientes y en la documentación oficial de ambos ejércitos.