Cientos de personas se movilizaron esta noche en Argentina portando carteles, banderas y cacerolas en repudio contra las retenciones y la persistencia del conflicto entre el campo y el Gobierno en varios barrios de Buenos Aires, informaron los medios locales recogidos por Europa Press.

Al grito de "¡Argentina!", con banderas en sus manos, golpeando cacerolas y haciendo sonar las bocinas de sus automóviles, los ciudadanos protestaron horas después de que el líder de una organización social cercana al Gobierno acusara al sector agropecuario de querer dar un golpe de Estado.

La disputa comenzó en marzo cuando la presidenta, Cristina Fernández, elevó los impuestos a las exportaciones de granos, disparando una cruda protesta de los productores que aseguran que no pueden trabajar por la alta presión fiscal.

ORIGEN DE LAS PROTESTAS

Pero lo que más rechazo genera en las clases urbanas es la forma en que el Gobierno enfrentó las manifestaciones, con un duro discurso y acusando a los productores de "golpistas". También rechazan la forma en que los grupos que apoyan a la presidenta remueven a golpes de puño las protestas anti-Gobierno.

Además, numerosos vecinos se adhieren a la protesta desde los balcones, aplaudiendo y golpeando también sus cacerolas. La convocatoria se realizó, como otras veces, por medio de mensajes de texto, donde también se habló de la realización de un apagón de 15 minutos "para pedir un basta Cristina".

Por otra parte, las protestas se hicieron en algunas localidades del interior del país como Posadas y Rosario. Mientras tanto en Gualeguaychú se organizó un tractorazo en reclamo del diálogo para solucionar el conflicto.