José de la Torre. El caso Gúrtel está adquiriendo caracteres de auténtiva vergüenza nacional, incompatiblle con una democracia, aunque sea la española.No es admisible el goteo de filtraciones que deja caer el gobierno, cunado no la fiscalia, para ensuaciar convenientemente al PP. La indefension en que quedan los supustos acusados es propia de los paises totalitarios. Sí, muy propio de los gobernantes amigos de Rodriguez.

La diferencia es que allí dan la cara, y aquí se traga todo lo que sea necesario, no sea que enfademos a cuatro chulillos que se pavonean por la política nacional, sin que nadie les pare los pies.

Ahora hemos pasado de los ternos regalado, dicen,al presidente de la comunidad valenciana, pecado gravísimo de ser cierto para un partido impoluto como el socialista, que, por lo visto, nos quieren convencer que ellos de corrupción nada de nada. Eso sería impensable. así que no se hable más del chalet de don Pepiño en Villagarcia de Arosa y, para qué contar, del supuesto negociado de los Chaves, padre e hija. Pero bueno, esas son cuatro perras gordas, y no los famosos ternos. Ahora resulta que , según el nuevo infundio, doña Rita Barberá se dedica a coleccionar bolsos de Vuitton, también recibidos de algún admirador, pues la alcaldesa lo hace muy bien.La noticia da la vuelta al ruedo, y se entera toda la parroquia, menos los que están veraneando, que todo esto les importa un pepino, no un pepiño, ese si que
importa, sobre todo desde que es ministrol y viste de escaparate.

¿Quién será su sastre?. Seguro que don José le paga. Por algo es sociata.Pero, por desgracia, no hay que tomar las cosas a chacota. Un gobierno como el que nos gastamos,es dificil de soportarlo por más tiempo.Hay que esperar que el respetable les mande a paseo en la próxima ocasión.Claro que el PP tedrá que rectificar muchas cosas; pero esto queda para otra ocasón.