China lanzará mañana el Shenzhou VII
Débora Altit (EP). 24 de septiembre. China ha programado para mañana por la noche el lanzamiento de su nave Shenzhou VII, en la que será la tercera misión tripulada que envía al espacio.
Los responsables del programa espacial chino hicieron hoy públicos los nombres de los astronautas que viajarán en esta última misión y, que, en un "aún hay más" de China, no sólo cuenta con un tripulante más que en el Shenzhou VI, en 2005, sino que también incluirá un paseíllo espacial.
La puesta en órbita de la nave se realizará entre las nueve y diez media de la noche (hora local) desde el centro de lanzamiento de satélites de Jiuqian, en la provincia norteña de Gansu, para lo cual se utilizará la lanzadera, también de fabricación nacional, Larga Marcha.
Los 'taikonautas' (término usado por China para nombrar a sus astronautas, por 'taikong', "espacio" en mandarín), elegidos son Zhai Zhigang, Liu Boming y Jing Haipeng.
Todos ellos tienen 42 años y son novatos en lo que a viajes espaciales se refiere, aunque han sido entrenados durante años. Lo que todavía no se conocerá es quién será el encargado de hacer el paseíllo espacial.
Uno de los trajes espaciales utilizados por los astronautas será de fabricación rusa y el otro de fabricación china, aunque no se aclaró si el traje ruso se empleará para realizar el paseíllo o lo llevará el 'taikonauta' encargado de asistir a su compañero.
China puso en órbita una nave tripulada por primera vez en 2003, con lo que se sumó a una hazaña sólo lograda por EEUU y la antigua URSS. El gigante asiático ha declarado que ya cuenta con la preparación suficiente para entrenar a astronautas extranjeros y, además, tiene la intención de hacerlo.
Según Chen Shanguang, director del Centro de Investigación Espacial y Entrenamiento, las dos misiones tripuladas anteriores, llevadas a cabo con éxito, demuestran la habilidad china para preparar a sus astronautas.
"La cooperación internacional es una tendencia inevitable en los vuelos espaciales tripulados, que son proyectos a gran escala que exigen complejas tecnologías y un inversión enorme", apuntó Chen.