Citas y frases célebres desconocidas
Frases célebres para cada ocasión es un tributo a la grandeza de sabiduría en las palabras
Que los mayores siempre han mirado con suspicacia los avances de las nuevas generaciones y puesto en duda si saben divertirse tanto como ellos u obrar con decencia es algo que ya lo narran los autores antiguos.
Hoy en día, en una reunión familiar, en una de barra de bar e incluso en un consejo de dirección, cualquiera puede citar una frase célebre y adjudicársela a un prohombre, y si alguno de los presentes pone en duda la veracidad de la autoría, siempre hay alguien dispuesto a consultarlo a través de un buscador de Internet, pero la verdad es que Internet no es la bicoca de la sabiduría y hay que saber dónde buscar, porque ha sido con la aparición de Internet que han proliferado los memes que adjudican frases célebres o simplemente frases ingeniosas a personajes que nunca les dijeron.
Einstein ha sido uno de los personajes más destacados al que se le han adjudicado falsamente frases célebres, quizás porque pertenece al mundo científico y es un personaje que gusta por igual a personas de todos los géneros y clases sociales, pero basta con leer sus libros sobre pensamientos para darse cuenta que muchas veces se le hacen decir cosas que incluso van en contra de su visión de la vida. Aún así, no deja de ser el personaje que más aparece en los memes.
Pero lo de la veracidad de las frases célebres es algo que viene de antiguo, es conocido que el escritor Enrique Vila-Matas, tenía la costumbre de lanzar sentencias y adjudicarse las a cualquier escritor, era un modo de epatar y de poner en balanza a sus oyentes. Incluso la celebérrima frase “Elemental, querido Watson”, que se atribuye al detective Sherlock Holmes, nacido de la imaginación del escritor Conan Doyle nunca apareció en ninguna de sus novelas, sino que se añadió, como colofón final de las primeros rodajes cinematográficos.
Las palabras pueden salvarnos en muchas situaciones
Pero la frase célebre, leyenda o realidad, existe y sirve para consolarse a uno mismo, definir una situación o mostrar los conocimientos de quién las formula. Lo cierto es que es algo verdaderamente sugerente buscar frases de varios tipos, que se ajusten a situaciones personales o generales, porque en realidad estas reflexiones muestran que la esencia del ser humano es la misma por muchos años que pasen. Y sus deseos, anhelos y moral, también, salvo pequeñas modificaciones según la evolución de la humanidad.
“El sabio nunca dice todo lo que piensa, pero piensa todo lo que dice” afirmó Aristóteles, esta frase y otras más leídas pertenecen al mundo de la afirmación, de las frases que han hecho y hacen historia. Al nombrarlas en voz alta, nos parece entender toda su magnitud e importancia, pero si encontramos una frase bien construida que diga lo contrario también sucederá lo mismo, no en vano, los seres humanos vivimos también en contradicción, o, al menos, la conocemos.
De todas las citas y frases célebres, las que siempre están vivas y no necesitan análisis son las que hablan de amor, puesto que el sentimiento no se somete a la razón. Una frase puede condicionar la vida de una persona para siempre, depende de quién la pronuncie y en qué momento, del mismo modo que una preciosa reflexión puede pasar desapercibida, porque las palabras tanto pueden curar como producir una gran herida, así como una sentencia puede ser en sí misma una declaración de intenciones.
Y si esta frase la oímos decir a un cualquiera al que no queremos citar, siempre podemos adjudicársela a Einstein, que le dará prestancia y brillo.