FórmulaYA. De cara al 2015, el nuevo Honda CR-V incorpora novedades en el diseño, la línea de motores y las tecnologías a bordo, lo que le confiere una presencia superior en la carretera y mayor sofisticación.

En primer lugar, el diseño es más deportivo, las modificaciones más notables se aprecian en la delantera, con faros renovados que desembocan en la parrilla y un nuevo parachoques que le dan un aspecto más ancho.

En la motorización, hay varias opciones: un diesel de cuatro cilindros i-DTEC de 1,6l, que ofrece una potencia de 160CV y un par de 350Nm. Éste viene con tracción a las cuatro ruedas y dos cajas de cambios disponibles, una automática de nueve velocidades y una manual de seis, con emisiones menores de 135g/km de CO2. La otra opción es un motor diesel con tracción a las dos ruedas y transmisión manual, de 1,6l i-DTEC de 120CV, con emisiones reducidas a 115g/km. El motor de gasolina i-VTEC de 2 litros, que ahora cumple la normativa Euro 6 sobre emisiones, seguirá disponible con una potencia de 155CV.

En tercer lugar, y por último, hay que mencionar los cambios introducidos en el interior. El objetivo de Honda de ofrecer un interior más funcional y sofisticado consiste en una la inserción de efecto cromado a lo ancho del salpicadero, así como al uso de materiales de primera calidad en las principales superficies. En el equipamiento, cabe destacar el nuevo centro de infoentretenimiento que ofrece una amplia variedad de funciones integradas en una pantalla táctil de siete pulgadas. Permite tener un acceso rápido a la información del vehículo, la cámara de visión trasera para aparcar y la música, con conectividad Bluetooth y la tecnología MirrorLink para móviles.