No solo la sociedad en general va evolucionando y avanzando en diferentes aspectos, también el mundo financiero y el de los negocios transcurren por un camino similar. Así como la llegada de las nuevas tecnologías ha permitido un sinfín de nuevas maneras de comunicarse y de ampliar conocimientos, de la misma manera ha ocurrido con el mundo de nuevos negocios financieros.

Así, el entorno digital ha permitido el desarrollo de nuevos modelos de negocio, que hace no tantos años eran totalmente impensables. Desde contratar hoteles con el móvil hasta firmar acuerdos con una firma digital. Y el sector financiero no es ajeno a este movimiento y ha empezado a ver cómo se han ido haciendo hueco nuevos actores tecnológicos en un mercado presidido por entidades bancarias. Estos innovadores proyectos no solo ofrecen flexibilidad y movilidad a los usuarios sino que, además, presentan competitivas alternativas de inversión y de ahorro.

Internet ha transformado nuestras vidas, las comunicaciones, la forma de trabajar. En definitiva, ha sido una revolución que sobre todo, ha permitido derribar barreras y aproximar clientes sin necesidad de intermediarios. Un ejemplo claro de este nuevo entorno lo encontramos en la banca, donde los clientes hasta hace poco no tenían más remedio que pasar por estas entidades si querían solicitar un crédito o invertir sus ahorros. Internet ha permitido el afloramiento de plataformas que permiten poner en contacto a prestatarios e inversores, mejorando las rentabilidades para ambos y eliminando al intermediario.

Estas novedosas plataformas como Excelend proponen nuevas opciones para los clientes, diversificando las alternativas que tienen los usuarios para invertir o solicitar financiación. Ayudan a encontrar financiación con el mejor precio posible y ayudan a los inversores a acceder al mercado crediticio.

Algunos de estos modelos, recién aterrizados en España, llevan ya tiempo funcionando en otros países, principalmente en el entorno anglosajón, donde han demostrado su consolidación y rentabilidad.

En definitiva, hay que aprovechar el nuevo entorno digital, que día a día avanza a pasos agigantados.