Cuando Tarradellas quería mil Mossos y Aznar dio diez mil
Eduardo de Prado. Pilar Rahola, que de esto sabe, comparaba ayer, 8/4/2015 a ''dos ministros de
Interior'' de ''dos Estados'' (sic) en 8 TV Barcelona. El ministro catalán, sic, Espadaler, dice que muy bien, pero el ministro español, Fernández Díaz, dice que muy mal. Esto pasa porque Josep Tarradellas en su día se conformaba con 1.000 Mossos d'Esquadra (mil), pero Aznar, sin venir a cuento, le dio 10.000 a Jordi
Pujol. Ahora ya presupuestan para un pequeño 'ejército' de Mossos de 45.000 en pocos años. Y ayer detuvieron a 11 islamistas radicales.
Atacada por todos los frentes (separatistas, Ángel Colom con los magrebíes,
yihadistas, etc., etc.) España va perdiendo; eso es claro... El separatismo va
ganando. (Te lo amplío).
2. El separatismo va ganando. Cuando ya más del 35% ó 40% de los españoles
habían llegado a la conclusión sabia de que, tal y como está el Título VIII de la
Constitución, nos lleva al desastre. Cuando ya un 25% de los españoles en las
encuestas incluso se inclinaban por suprimir las Autonomías, o al menos limitar
bastante sus competencias y su poder político (y su gasto excesivo, que nos
empobrece a todos); cuando nuevos partidos pedían ‘devolución de competencias’
al Estado central cuando no se usen bien, e incluso la aplicación del Artículo 155
(supresión de una Autonomía) de la Carta Magna, aparece el Separatismo Radical
azuzado desde las bases (pueblo) y desde Entes del Estado Español (Gobiernos
autonómicos).
Es una buena jugada para ellos.
Es una muy buena jugada estratégica, porque aunque no consigan ahora tal
objetivo secesionista, han logrado distraer la atención de los españoles.
Totalmente. Han conseguido que ahora, ante un peligro inmensamente mayor, en
teoría, se piense en el Titulo VIII de la Constitución como mal menor. Es decir: el
‘programa máximo’ de los separatistas ha logrado ‘hipnotizar’ a toda España y a
toda la Partitocracia. No se habla de otra cosa, mientras el ‘guadiana’ separatista
diario, día a día, mes a mes, año a año, sigue fluyendo, corriendo dentro de las
venas del Estado Español (CC AA). Enorme jugada de distracción.
La trampa ha funcionado. Los secesioncitas son infinitamente más astutos que un
Estado central lento, anquilosado, espeso, casposo en ciertos rasgos. Ciego.
3. Les ha funcionado y España a va perdiendo porque el actual ’engranaje estatal’,
tan bien diseñado para agradar a los nacionalistas y separatistas periféricos, con la
intención de amansarlos (para, erróneamente, ‘’contentar a los que con nada se van
a contentar’’, como bien denunciaba el pensador Julián Marías) va a llevar a España
a su descomposición como Nación (sólo es cuestión de dejar pasar el tiempo, con el
actual ‘diseño’/engranaje funcionando) y aboca al Estado a su inviabilidad
unitaria.
Todo ello tal y como ahora están actuando algunas Comunidades Autónomas, ya
casi “Estados dentro de Estado”, -algunas-, ante la impotencia – esa es la palabra:
IMPOTENCIA – del Estado-Administración central. Y tal y como está el traspaso de
competencias, la propaganda inmisericorde de los separatistas por/con todos los
medidos, y son infinitos, y sobre todo con el traspaso de la ENSEÑANZA y otras
estructuras que debieran ser centrales como INEM, Sanidad Nacional, tráfico y
policía, y los servicios sociales al menos en su diseño y coordinación, …etc. España
caerá como fruta madura. Y el Estado unitario con ella.
España va perdiendo. Y es un error, no diré una irresponsabilidad por respeto y
aprecio, pero sí un error que entes como por ejemplo SCS, que tanto prometía de
inicio, se dediquen a afirmar y reiterar que ‘vamos ganando’. España va
perdiendo, señoras, señores. Y eso es evidente. Salta a la vista. No hagan ni nos
hagan hacer la del avestruz, por favor.
Barcelona, 9/04/2015
Post Data publicable: Un buen amigo, conocedor de este texto, me aconseja :
“Coincido con bastantes de las afirmaciones que haces…. […….]. Por otra parte,
entrando ya en la materia de la que te ocupas, me parece que aunque nos lleven
mucha ventaja resulta muy poco estimulante reconocer que vamos perdiendo.
Ningún entrenador les diría eso a sus jugadores en el descanso si quiere ganar el
partido. Y a mi me gustaría ganarlo””.
Le respondo. Muchas gracias. Coincido en todo, y en esa dirección iba yo, pues
hablo de debatirlo --obviamente que tenemos que hacer debates, frecuentes, para
Fijar posiciones conjuntas- hasta el párrafo 'Por otra parte, entrando ya en la
materia de la que te ocupas, me parece que aunque nos lleven mucha ventaja resulta
muy poco estimulante reconocer que vamos perdiendo. Ningún entrenador les diría
eso a sus jugadores en el descanso si quiere ganar el partido. Y a mi me gustaría
ganarlo'. Veo que coincidimos en el fondo. En las formas: eso normalmente es así,
se hace así, en términos generales, como dices. Hasta Mao Tse Tung, aplicó esta
máxima en la finalmente Victoriosa Larga Marcha, según leí en algunos libros.
Trasformaba las derrotas en 'victorias', para sus guerreros. Vale.
Pero ocurre, sin embargo que si no 'decimos' que vamos perdiendo, el Estado, --
Madrid, el Gobierno y hasta el pueblo español-- se acomoda, no hace nada. Se
duerme en los laureles. Y ese peligro es, para mí, más grave que 'decir que vamos
perdiendo'. Por que no lo decimos ya ni siquiera a niveles internos. Y me parece
'suicida'.
En esta coyuntura - y lo he pensado - soy partidario de decir: Sí , 'Tenemos que
ganar' aunque por ahora "no vamos ganando". Que es lo mismo que decir que
vamos perdiendo pero proyectando Objetivos y Optimismo.
Nosotros tenemos que enviar mensajes al pueblo español, cierto; pero también al
Gobierno y la partitocracia. Ese es el equilibrio necesario. Considero un gran
honor que se haya tomado la molestia de contestarme. VALE. Eduardo