Redacción Madrid. 25 de Septiembre.

   El juez que instruye las diligencias contra Juan José O.N. por la muerte a puñaladas del joven senegalés Ousmane Kote en las '200 viviendas' de Roquetas de Mar (Almería) dictó hoy auto de ingreso en prisión incondicional para el autor confeso del homicidio, que era trasladado al centro penitenciario provincial de El Acebuche después de estar 72 horas detenido en la Comandancia de la Guardia Civil de Almería.

   Fuentes judiciales precisaron a Europa Press que el hombre, de 26 años y alias 'El Bollo', permaneció en el edificio ubicado en la calle Reina Sofia del municipio del Poniente hasta pasadas las 14.00 horas y a la espera de que el grupo unos 40 inmigrantes que se concentraban a primera hora de la mañana frente a los Juzgados de Instrucción se disolviesen tras pedir, de forma pacífica, "justicia" para su compatriota.

   El auto, que le imputa un presunto delito de homicidio, llega después de que ayer la juez de guardia de Almería ante la que debía prestar declaración decidiese inhibirse a favor del juzgado instructor y de que reconociese ante la Policía Judicial haber asestado la puñalada mortal en el pecho por la que falleció Ousmane Kote en la noche del pasado día 6 y por la que también fueron detenidos cuatro menores que permanecen ingresados en tres centros para infractores de Andalucía.

   Juan José O.N., al que la Guardia Civil localizó el pasado martes en el interior de un cortijo ubicado en el diseminado de Los Llanos de La Cañada, permaneció 16 días en paradero desconocido, amparado por una persona que le ayudó a mantenerse oculto, que le aprovisionó de gran cantidad de víveres en previsión de un largo encierro y cuyo rastro buscan para proceder a su detención.

   En el cortijo situado en el camino Flor Indálica, los agentes de la Policía Judicial hallaron numerosos efectos, algunos de ellos muy importantes para una investigación en la que se conoce "todo lo que ha hecho y donde ha estado, así como cada uno de sus pasos casi con exactitud" desde que huyese tras la muerte de Ousmane Kote hasta el momento de su detención.

   Los primeros datos apuntaron a que Juan José O.N. no participó inicialmente en la pelea desencadenada sobre las 23,00 horas en las '200 viviendas' cuando un grupo de personas de origen subsahariano estaba en el lugar de los hechos y una persona les arrojó un cubo de agua desde una ventana por un problema de ruidos.

   Fue en la reyerta posterior desencadenada en el portal del edificio y que se trasladó más tarde a la vía pública donde, según los menores detenidos, el presunto homicida propinó una patada en la cabeza al fallecido y le acuchilló a la altura del pecho una vez que ésta se encontraba tendida en el suelo.

   Tras los hechos, se desencadenaron graves disturbios que se prolongaron durante dos noches y que precisó el despliegue de hasta un centenar de efectivos de los Grupos Rurales de Seguridad (GRS) en la barriada del municipio, con la detención de diez ciudadanos subsaharianos implicados en la alteración del orden público.

   Ousmane Kote, soltero y sin hijos, era el mayor de cinco hermanos y, como primogénito, seguía la tradición de venir a España a trabajar para enviar dinero a su familia, que ha pedido a las autoridades españolas que el cuerpo sea repatriado lo antes posible.