Lo que muchos no saben. Hay reconocidos hasta 47 dialectos del español. desde el madrileño hasta el chilote, el andino o el rioplatense y jergas como el cheli. 
Son innumerables los gastos que los reclusos acarrean
DELINCUENCIA
Mariano Pasqual de Riquelme. No ha mucho, he leído que las cárceles españolas (en la foto la de Pamplona con su piscina) están llenas a rebosar de (como ahora llaman) internos. Es un eufemismo más de los que estamos invadidos. Parece como si diera miedo llamar a las cosas por su nombre, siendo el más ridículo de todos lo que han dado a denominar “relación sentimental”.
Parece que es más elegante que darle su nombre verdadero: Público concubinato. Pero así están las cosas… y cartuchera al cañón, coja o no coja.
Empece hablando de la delincuencia y me he ido por los cerros de Ubeda. Retorno a mi propósito.
Los “internos” están recluidos por haber atentado ostensiblemente contra la sociedad: No añado civil porque SOCIEDAD, por antonomasia no hay otra que la sociedad; las “otras” tienen que estar adjetivadas.
Y resulta que amen de haber lesionado en mayor o menor grado a sus conciudadanos, su actitud supone un serio gasto para el “pópulo”.
Son innumerables los gastos que los reclusos acarrean y como tampoco tengo datos, solo diré que entre el funcionariado de prisiones, alojamiento, manutención y un largo etc, debe ascender la cuenta más que los gastos del Gran Capitán (léase gobierno y gobiernillos)
Solución ¿? Fácil, que los internos o presos PAGUEN no sólo con la privación de la libertad, sino por los gastos que ocasiones. ¿Qué son insolventes? Pues que la familia lo haga por ellos.
Con esta medida, no sólo los ciudadanos INOCENTES, no tendríamos que estar pagando por los delitos de otros, sino que disminuiría sensiblemente las transgresiones de la LEY.
Una UTOPIA? Posiblemente… pero las hay mayores, como llamar democracia al sistema que disfrutamos, que no es ni más ni menos que el GRAN EUFEMISMO.