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Introducían mujeres brasileñas en España y las obligaban a prostituirse bajo amenaza de muerte

Desarticulada una organización de trata de blancas en Gerona

Redacción Madrid. 29 de octubre. La Policía Nacional ha desarticulado una organización afincada en Gerona que introducía en España a mujeres brasileñas prometiéndoles trabajo como camareras en hoteles y que luego las obligaba a prostituirse en clubes de alterne bajo amenaza de muerte.

   Según informó hoy la Policía Nacional, han sido detenidas 25 personas en las localidades gerundenses de Lloret de Mar, La Bisbal d'Empordà, Calonge, Vilablareix, Mont-ras y Fontcoberta. Catorce de ellos pertenecen a la organización desmantelada.

   Además, la Policía Federal de Brasil arrestó a la mujer que captaba a las víctimas, la mayoría de la localidad de Natal. La detenida, C.F.D.T., pareja de uno de los detenidos en Gerona, se ocupaba de aleccionarlas respecto a cómo vestir y comportarse en los controles fronterizos para dar la impresión de ser turistas que viajaban a España por un corto periodo de tiempo, y les daba instrucciones para ponerse en contacto con las personas que se harían cargo de ellas.

   Los responsables de la organización les facilitaban el billete y el dinero necesario para cumplir con las exigencias en materia de inmigración solicitadas en la frontera. Por ello, reclamaban a las mujeres unos 2.500 euros, además de su manutención en el club, por la que les cobraban 70 euros diarios.

   Para saldar su deuda, las chicas tardaban unos seis meses, puesto que sus captores las multaban con 300 euros si no acataban sus normas. Trabajaban todos los días, y si querían un día libre, debían abonar 300 euros. Además, si terminaban su jornada antes de las 8.00 horas, tenían que pagar 150 euros al club.

   La investigación se inició en mayo cuando el Consulado de Brasil de Barcelona informó a la Policía de que dos mujeres brasileñas les habían pedido auxilio tras huir de un club de alterne de Gerona donde las obligaban a ejercer la prostitución bajo amenazas de muerte.

   Paralelamente, la Policía Federal de Río Grande do Norte (Brasil) inició una investigación por tráfico de personas para explotarlas sexualmente. Les constaba que los gastos de traslado de varias víctimas habían sido asumidos por empresarios españoles, concretamente por los propietarios de dos clubes de alterne de Gerona, donde residían los principales miembros de la red.

   Los responsables de la organización retenían los pasaportes de las mujeres y les impedían abandonar las instalaciones del club de alterne hasta que cancelaban su deuda. El primer servicio sexual del día era para el Club y el segundo, para pagar la deuda contraída para venir a España. A partir del tercer servicio el importe era para la víctima, a la que se debía descontar una tercera parte que era también para el local y los gastos de hospedaje y manutención.

   A los detenidos les imputan delitos contra los derechos de los ciudadanos extranjeros, relativos a la prostitución, contra los derechos de los trabajadores, detención ilegal, amenazas, tenencia ilícita de armas y aplicación de la Ley de Extranjería, según los casos.

   Durante la operación, se realizaron cinco registros, dos en clubes de alterne de Gerona, otros dos en domicilios particulares, y otro en Brasil. Se intervinieron, entre otros efectos, una pistola del calibre 6/35 milímetros, dos pistolas de gas comprimido, 68.202 euros, material informático, justificantes de envío de dinero a Brasil y documentación diversa.

 
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