José Buitrago

La compañía aérea SPANAIR ha inaugurado como nuevo destino, los vuelos entre Madrid y Belgrado, por lo que ya no se necesita hacer escala para realizar el vuelo directo entre ambas capitales.

Con gran expectación e ilusión en este nuevo proyecto, SPANAIR organizó un viaje de prensa  para los Medios de Comunicación españoles con el fin de conocer in situ el nuevo destino, que seria Belgrado la capital de Serbia, una ciudad que tuvimos la suerte de descubrir en unas pocas horas, que fue nuestra estancia en ella.

Nada más llegar a Belgrado fuimos recibidos por las autoridades del aeropuerto Nikola Tesla, por miembros del Turismo de Serbia, por el representante de la Embajada de España en Serbia y por el responsable de SPANAIR, los cuales nos ofrecieron una rueda de prensa, para los Medios españoles y serbios,  en la cual se expusieron todas las ventajas que se iban a producir con motivo del nuevo trayecto entre Madrid y Belgrado.

Al mediodía y después de dejar nuestro equipaje en un hotel céntrico de Belgrado, iniciamos nuestra visita de la ciudad, no sin tener que aguantar el numeroso tráfico de coches, tranvías, autobuses, trolebuses que inundan las calles de esta bella ciudad, ya que al no disponer de Metro la circulación se hace muy incómoda.

Belgrado es una ciudad ideal para estancias cortas y escapadas fin de semana. A la orilla de los ríos Danubio y Sava, Belgrado es una de las ciudades más antiguas de Europa, una metrópoli rejuvenecida y llena de vitalidad. La capital de Serbia ofrece al visitante una intensa actividad que combina una riquísima oferta cultural con una vibrante vida nocturna. Belgrado está llamado a ser uno de los destinos más interesantes del Este europeo, con precios que para el turista español son más que asequibles.

A finales de los 80 era uno de los principales destinos turísticos del Sudeste de Europa con casi doce millones de noches de hotel al año, de los cuales, un millón y medio correspondían a visitantes extranjeros. La capital, Belgrado, alojó en 1989 alrededor de 1,4 millones de visitantes para un total de 2,2 millones de noches de hotel al año.

A través de los siglos, Belgrado, la capital de Serbia, se ha modelado a si misma entre las riberas del Danubio y del Sava, ríos que serpentean en torno a su construcción más emblemática, la Fortaleza de Kalemegdan.

La intensa vida cultural y artística se respira en el aire y queda congelada en su interesante arquitectura, tanto clásica como moderna. El Museo de Arte Contemporáneo, Museo Nacional,  Museo Etnográfico, Galería de Frescos o el Palacio de la Princesa Ljubica son algunas de las maravillas que hay que ver en esta ciudad llena de galerías de arte y museos.

Belgrado dispones de una de las vidas nocturnas más intensas de toda Europa, con un amplio registro de espectáculos, entre los que se incluye ópera, conciertos o teatros. La oferta es muy variada, desde una cena con música en directo en el bohemio distrito de Skadarlija, a un rato de relax en uno de los viejos cafés o en los barcos de la ribera del río, pasando por una noche de marcha en alguno de los muchos locales nocturnos de la ciudad.

También queremos destacar la infinidad de platos y guisos que nos pueden ofrecer en cualquier restaurante de la ciudad, siempre con una calidad y sabor inmejorable.

Con motivo de la inauguración del trayecto entre Madrid y Belgrado, el Embajador de España en Serbia con sede en Belgrado D. Iñigo de Palacio y su esposa, ofrecieron una recepción en su preciosa residencia a personalidades de Serbia y España, así como a los Medios de Comunicación españoles que nos habíamos trasladados a Belgrado para asistir a este acontecimiento.

Una vez terminado nuestra visita a Belgrado, nos comprometemos a volver esta encantadora ciudad para poder disfrutar más tiempo de su encanto y amabilidad.

Desde estas páginas quiero mostrar mi agradecimiento por el apoyo prestado en este viaje a SPANAIR a través de Javier Ortega,  Turismo de Serbia  en España por medio de Gonzalo Santamaría  y a la Embajada de España en Serbia.