Diplomacia Cultural: Cónsul Honorario de Rusia en la Comunidad Valenciana
Daniel Ponce Alegre. Teólogo y Antropólogo. Delegado en Levante de Diplomacia. Este mes de Febrero se cumple un año del nombramiento de D. Ramón Congost, empresario valenciano de éxito especializado en las relaciones económicas y culturales con Rusia, como Cónsul Honorario de la Federación de Rusia en la Comunidad Valenciana.
En el transcurso de este último año y con la ayuda de muchas personas: Ramón, Dasha, Ana, etc, se abrió la Oficina del Consulado para ayudar a todos los rusos residentes en la Comunidad Valenciana que lo necesitaran, así como para la promoción de diversos eventos culturales y benéficos.
Por todo ello, y para celebrar tan señalada fecha, la Asociación " Amics ", creada por el Cónsul, organizará el 11 de Marzo a las 20:00 horas, una cena de gala en el Ateneo Mercantil Valencia, sito en la Plaza del Ayuntamiento, 18 de la ciudad de Valencia.
El fin es recaudar fondos destinados a la organización benéfica rusa " La Esperanza ": http://www.hospicefund.ru/fund. cuyo objetivo es el sostenimiento de hospicios en Rusia, niños huérfanos y familias que necesitan ayuda para sobrevivir.
A tal efecto se crea la posibilidad de poder contribuir a la Asociación sin necesidad de asistir a la cena.
Presidirá el Acto el Embajador de la Federación de Rusia en el Reino de España, el Excmo. Sr. D. Yuri Korchagin.
Está prevista la asistencia de varias autoridades públicas: civiles y militares, así como de los cónsules de otros países residentes en la Comunidad Valenciana, Murcia y otras Comunidades Autónomas como Cataluña, Presidentes de asociaciones rusas, ciudadanos rusos residentes y empresarios, y sacerdotes ortodoxos rusos como el de Altea, Torrevieja y el de la Iglesia Ortodoxa Rusa " San Jorge " situada en la C/ Norte, 6 de Valencia: D. Sergei Prosandev y su esposa Ina.
Estos pequeños gestos, como son por ejemplo cenas y eventos benéfico-culturales crean el buen ambiente para unas relaciones internacionales y diplomáticas sólidas entre dos países de tradición histórica y cultural cristiana común, a pesar de las piedras colocadas en el camino.