Editorial: "2008, nuestro año"
Sería pretencioso y nada elegante decir que lo mejor de
Diario YA nacía el pasado 1 de Julio con la firme determinación de ocupar un sitio vacío, el que había dejado hace más de diez años su precedente en papel, el antiguo YA. Era un hueco que tenía que ver con la información de calidad y con una visión católica de la misma, con el periodismo honrado, independiente de verdad, preocupado sólo de ofrecer aquello que un lector cristiano puede buscar en Internet para informarse, formarse y entretenerse. Un hueco que nadie ha querido o ha sabido ocupar antes.
Seis meses después, es hora de hacer un pequeño análisis (si nos permiten este minúsculo, aunque necesario, ejercicio de ombliguismo profesional), que no puede ser calificado de otra forma que de positivo. Primero, por la respuesta excepcional que hemos obtenido de nuestros miles de lectores, que nos han respaldado con su presencia diaria en nuestra web, con sus cartas y mensajes, etc. Segundo, por la espléndida acogida que nos han dispensado los compañeros de los demás medios de comunicación que, sin excepción, nos han dado su enhorabuena sincera y nos han animado a ser constantes en nuestra ardua y complicada tarea.
Y es que Diario YA ha nacido sin padrino. Como se dijo en el acto de presentación, el pasado 3 de octubre en
Al revés. No somos unos advenedizos. No hemos venido a enriquecernos, ni a medrar, ni a engañar a nadie. Somos humildes pero transparentes, tan empeñados en intentar hacer a diario un periódico que sea digno de la cabecera que fundó Don Ángel Herrera que no nos queda tiempo ni para pelearnos con otros medios, ni para fabricar culebrones ficticios, ni mucho menos para bailarle el agua al político de turno; para esto último, lo admitimos, hay que nacer…, y nosotros somos aves de campo, no de criadero.
No queremos dejar pasar esta ocasión, este último editorial de 2008, para agradecer a todas las personas que han colaborado con nosotros su ayuda desinteresada, su aliento y comprensión, y su impagable compañía en estos meses duros de trabajo y apreturas. Podemos decir con orgullo que hemos recuperado para España, quizá cuando más falta hacía, un diario que nunca se avergonzó de ser lo que era. Es mucho lo que queda por delante, pero sabemos que lo conseguiremos; aunque sólo sea porque este Ministro jamás deja en la estacada a sus secretarios.
Miércoles, 31 de diciembre de 2008.