El Congreso de Católicos y Vida Pública, como pudo comprobarse ayer en la interesantísima Mesa Redonda sobre la Comunicación de la Esperanza, es mucho más que un simple encuentro de católicos para escucharse y sentirse acompañados. Es el germen de la nueva sociedad, la semilla de un nuevo mundo que volverá, sin duda, a encontrar su razón de ser en Jesucristo.
Alfonso Coronel de Palma, presidente del Grupo COPE, Julio Ariza, presidente del Grupo Intereconomía, Juan Manuel de Prada, escritor, columnista y miembro del Consejo Asesor de este diario, y Miguel Ángel Velasco, director de Alfa y Omega y presidente de la Mesa demostraron que la esperanza no es utopía, que hay mimbres para hacer un hermoso cesto de información y opinión veraz desde presupuestos cristianos.
Cada uno en su estilo, y en sus circunstancias, estos cuatro grandes comunicadores nos convencieron de que no todo está perdido, ni mucho menos: de que están dispuestos a seguir dando testimonio cada día, enfrentándose a la fortísima corriente adversa del relativismo, oponiendo a las dos lacras del socialismo y el liberalismo la palabra de Dios y la doctrina que emana de la Santa Madre Iglesia.
Sus intervenciones fueron muy brillantes, resultaron frescas, novedosas, originales, atractivas…Un verdadero oasis en el desierto que hay que atravesar cada día para conocer la actualidad. Se ofrecieron fórmulas interesantes para hacer un nuevo periodismo que sea capaz de buscar siempre la verdad, por encima de intereses insignificantes; el periodista católico ha de ser, ante todo, eso: un buscador infatigable e insobornable de la verdad.
El director de Diario YA, en el turno de los comunicantes, participó, con la lectura de un breve resumen de su texto, en un evento que, además, este año ha tenido una enorme repercusión en los medios de comunicación. Buena cosa es que, al menos, la sociedad tenga conocimiento de estas iniciativas que buscan respuestas a eternas preguntas, y que ponen luz allí donde a la mayoría le interesa que haya oscuridad.
Domingo, 23 de noviembre de 2008.