Redacción Madrid. 30 de enero.

     El decisivo partido de vuelta de los cuartos de final de Copa entre los dos equipos catalanes de la Liga BBVA se decidió a favor del FC Barcelona, que se medirá al Mallorca en 'semis', pero vivió una primera mitad heterogénea, con dominio azulgrana pero con pequeñas rachas de iniciativa espanyolista, pues ambos equipos tuvieron ocasiones para marcar y pasar de ronda.

   No obstante, el Barcelona consiguió hacerse amo y señor del encuentro tras marcar el primer gol a falta de 10 minutos para el descanso, pues hasta llegar al mismo asedió al Espanyol, y anuló por completo el buen trabajo defensivo realizado por los hombres de Pochettino hasta el momento. Y es que los 'pericos' saltaron al césped motivados y, pese a entregar el balón al rival, presionaban casi hasta en el área de Pinto y se fue asentando con el paso de los minutos.

   Por su parte, el Barça intentaba encontrar espacios en la poblada defensa blanquiazul. En una de las pocas ocasiones en que lo consiguió, vio como le anulaban un gol a Gudjohnsen por rematar un centro de Xavi en posición antirreglamentaria. En estos momentos, los 'culés' recuperaron la iniciativa y consiguieron descolocar un poco a la que hasta el momento era una infranqueable defensa blanquiazul, muy bien organizada y cerrando cualquier línea de pase.

   Con el contraataque como mejor arma, el Espanyol estuvo a punto de marcar cuando en el minuto 24 el ayer capitán Jonathan Soriano culminó mal una contra en la que se plantó solo ante Pinto, pero falló estrepitosamente y envió el balón a las nubes. Esta acción fue correspondida con un nuevo cabezazo de 'Guddy' bien detenido por Álvarez. Esta misma acción, idéntica, se repitió un minuto después pero con la cabeza de Xavi como protagonista.

   El Barcelona consiguió abrir la herméticamente cerrada lata del Espanyol pero, eso sí, con un poco de ayuda del guardameta. Tras disparo fuerte y raso de Sylvinho desde la banda izquierda, el cancerbero espanyolista no blocó el balón y éste llegó a Bojan para que lo empujara a la red. A partir de aquí, empezó el asedio blaugrana y primero Messi, luego Gudjohnsen y finalmente Xavi pusieron a prueba al meta blanquiazul.

   En la primera parte de este derbi el jugador más destacado no fue ni Messi, ni Alves ni otro de los habituales, pues éste fue el islandés Gudjohnsen. Desde el centro del campo, 'Guddy' ayudó en defensa, realizó cortes importantes y sacó el balón jugado con criterio. Pero donde destacó más fue en la llegada a la portería rival, pues hasta en tres ocasiones hizo trabajar duro al portero 'perico'.

   En la reanudación, casi sin tiempo para que la gente ocupara de nuevo sus asientos, el canterano Bojan colocó el segundo en el marcador --también el segundo en su cuenta particular-- tras superar con una delicada vaselina a Álvarez. De esta manera, el Barça puso tierra de por medio en la eliminatoria pues el Espanyol necesitaba marcar dos goles para pasar de ronda. Este Barça, cuando quiere y esto es casi siempre, es capaz de convertirse en una máquina de hacer goles. Diez minutos después del segundo, el central Gerard Piqué puso el tercero al cabecear en el segundo palo un buen centro de Alves.

   REACCIÓN INSUFICIENTE DEL ESPANYOL

   Sin embargo, el Espanyol se metió con algo de fortuna en la eliminatoria gracias a un gol, con rechace incluido, de Coro a la salida de un córner. Su disparo desde la frontal tocó en Puyol y se coló en las redes de Pinto. En esta misma jugada el capitán azulgrana tuvo que abandonar el partido con molestias.

   Si antes marcaba por duplicado el Barça, también hizo lo mismo el Espanyol y se metió de lleno, ahora sí, en la eliminatoria. Esta vez, el gol espanyolista llegó por un disparo potente y lejano del recién entrado Callejón que, como en el primero del Barça, tuvo la inestimable ayuda del portero rival. Pinto, que hasta el momento había tenido poco trabajo, se tragó un disparo que le iba directo hacia él quizá por un exceso de confianza.

   A partir de aquí, el Espanyol apretó para empatar el partido y ganar la eliminatoria pero el Barcelona, con la entrada de Iniesta y Eto'o, se hizo de nuevo con el control del balón y buscó de nuevo la portería de Álvarez en busca de la sentencia definitiva. La mejor de las ocasiones fue un duro centro-chut de Alves al que Iniesta, lanzándose en plancha, no llegó por bien poco.