La policía venezolana arrestó a uno de los capos mafiosos más buscados por las autoridades italianas, Salvatore Miceli. Se sospecha que Miceli actuaba como intermediario entre distintos grupos mafiosos en Italia y carteles de la droga colombianos. La policía, que actuó en conjunto con carabinieris italianos, lo detuvo en Caracas luego de tres días de seguir sus pasos.Interpol lo buscaba por varios cargos vinculados al narcotráfico y lo tenía registrado como uno de los 30 criminales más peligrosos de Italia. Miceli, embajador de la Cosa Nostra siciliana y la calabresa 'Ndrangheta ante los carteles colombianos, había logrado eludir a la justicia italiana desde 2001. Su arresto se produjo dos años después de que cayera, también en Venezuela, el capo mafioso Francesco Termine. Miceli, de 63 años, fue detenido cuando salía de su apartamento en la capital venezolana. La policía italiana emitió un comunicado felicitando a los agentes que participaron en el operativo de captura, que concluyó el sábado por la noche. En éste se afirma que "la investigación confirmó que Miceli desempeñaba un papel protagónico en el sector del narcotráfico y ratificó su habilidad de construir una sólida red de contactos con varias organizaciones internacionales del crimen organizado". La policía italiana ha asestado fuertes golpes a la mafia en los últimos años. Los arrestos más recientes incluyen el del "capo dei tutti i capi", o jefe de los jefes de los distintos clanes mafiosos, Bernardo Provenzano, en 2006. A éste lo siguió rumbo a la cárcel su aparente heredero, Salvatore Lo Piccolo, al año siguiente. Los carabinieri también han detenido a varios miembros de la Camorra napolitana, pero es difícil deducir si estos golpes responden a un esfuerzo coordinado para acabar con la mafia de una vez por todas, dice Kennedy.