Manuel Villena Lázaro. La nueva e imaginativa propuesta del FMI para acabar con el paro juvenil en España, consistente en rebajar, aún más, el salario mínimo, me ha hecho recordar mi más tierna infancia. Me crie en un barrio humilde y paradójicamente plagado de impresionantes casonas y palacetes.
En estas sustuosas viviendas moraban ilustres apellidos y las más de las veces seguidos de rimbombantes títulos nobiliarios. Todas y cada una de estas mansiones estaban repletas de toda clase de sirvientes: porteros, conductores, limpiadoras, lavanderas planchadoras, cocineras, niñeras... El salario de todo este personal consistía en poco más de la comida y lo que pudieran sisar. Esta situación la calificará el FMI como: "Cualquier tiempo pasado fue mejor"
Recomendaría, sobre todo a los jóvenes, tan expertos en el manejo de internet, que busquen y analicen detenidamente la letra del tango de la Menegilda de la zarzuela "La Gran Vía", compuesta allá por 1886, y podrán comprobar como gracia al FMI y sus seguidores pretenden hacer realidad el dicho: " La historia siempre se repite"