El Papa Benedicto XVI apuntó hoy la necesidad de una "relación armónica entre la religión y la vida pública", más importante aún en unos momentos en los que muchos comienzan a considerar la religión "más como causa de división que como fuerza de unidad".

   "He venido a Australia como un embajador de paz", dijo el Santo Padre durante el encuentro con líderes religiosos no cristianos que mantuvo esta mañana (madrugada del viernes en España) en la Sala Capitular de la catedral de Sidney. El Papa, acompañado del secretario de Estado Vaticano, el cardenal Tarcisio Bertone, se reunió con representantes judíos, musulmanes, hindúes y budistas, ante quienes subrayó la necesidad de unir los esfuerzos de todos por la paz, la reconciliación y la búsqueda de la verdad.

   "La religión ofrece paz pero más importante aún, hace crecer dentro del espíritu humano una sed por la verdad y hambre por la virtud", manifestó.

   El cardenal Pell, arzobispo de Sidney, en la presentación de este encuentro interreligioso, ya había hecho mención a que la fe y la razón conducen a la verdad, aunque "hay unos pocos hoy en día, quizás más ruidosos en el mundo de habla inglesa que en otros lugares, que rechazan esta sabiduría y ven en el mundo de la fe un caldo de cultivo del fundamentalismo". Además, Pell consideró que "las buenas relaciones que gozamos en Australia entre las diferentes religiones deberían poder contradecir esta opinión".

   Previo al encuentro con los líderes de otras religiones, Benedicto XVI sostuvo una reunión en la misma catedral con una docena de líderes cristianos (anglicanos, metodistas, luteranos, ortodoxos) ante los que indicó que el movimiento ecuménico ha llegado "a un punto crítico". Por ello, les instó a "pedir continuamente a Dios" que "renueve" sus mentes con la gracia del Espíritu Santo".

   Así, advirtió que contra la tentación de considerar la doctrina como fuente de división", el intercambio ecuménico no solo avanza mediante un intercambio de ideas sino "compartiendo dones que nos enriquecen mutuamente".

   El Pontífice mostró una gran cordialidad con diferentes líderes religiosos y ayer durante la bienvenida en Barangaroo apareció en buen estado físico, alegre y divertido.

   De nuevo hoy la prensa generalista australiana, marcadamente secularista en algunos casos, se ha rendido ante Benedicto XVI y no tiene más que elogios. El rotativo 'The Daily Telegraph' abrió hoy su portada con una foto a toda página de Benedicto XVI mientras recorría en el 'papamóvil' entre una multitud de fieles, bajo el titular de "Marea Santa".

   También el diario 'The Australian' dedica hoy dos grandes fotos en la portada y titula: "Un día gris cambia repentinamente cuando el Papa hace su primera gran salida pública", aunque en el interior muestra algunas informaciones críticas a la Iglesia en Australia. Por su parte, 'The Sydney Morning Herald' ofrece una gran foto del Papa por las calles de la ciudad al anochecer, con el titular "Brillando su luz".