Redacción Madrid. 18 de agosto.

El presidente del PNV, Iñigo Urkullu, reiteró hoy que su partido "acatará lo que diga" el Tribunal Constitucional sobre la ley de Consulta, pero no se quedará "quieto" ante una sentencia contraria. No obstante, precisó que no se puede "empezar a enredar a la ciudadanía con mensajes más bien populistas" diciendo que la consulta se celebrará a pesar de la resolución del TC. En cualquier caso, indicó que estudiarán "nuevas iniciativas" y "si no se puede celebrar ésta, se celebrará otra".

   En una entrevista concedida a Herri Irratia-Loyola Media, el dirigente jeltzale aseguró que las relaciones entre los componentes del tripartito "van bien" en relación "al programa de Gobierno" y también en lo que "respecta al planteamiento de iniciativa para una propuesta de solución al conflicto político vasco".

   En cuanto a la postura expresada por EA sobre la ley de Consulta, señaló que es preciso "ser conscientes de que cuando hablamos de una cuestión tan importante" como ésta "todo aquello que digamos afecta a todos aquellos que hemos prestado nuestros votos para aprobar esta ley". "Es un ejercicio de responsabilidad para con la ciudadanía de honestidad absoluta", indicó.

   De este modo, insistió en que, ante la "dificultad" de los recursos planteados ante el TC contra la ley aprobada el pasado mes de junio por el Parlamento vasco, "tenemos que ser honestos ante la ciudadanía" y reiteró que "tiene que obrar el TC", al que volvió a reclamar "se pronuncie antes del 15 de septiembre".

   Urkullu aseguró que el PNV "acatará lo que el TC diga", si bien aseguró que en su formación reaccionará. "No nos vamos a quedar quietos en el caso de que dicte una sentencia contraria a lo que es nuestra interpretación de la ley de Consulta", dijo. Sin embargo, precisó que no se puede "empezar a enredar a la ciudadanía con mensajes más bien populistas" en relación a que "pese a lo que diga el TC se ha de celebrar la consulta".

   Tras rechazar que el PNV sea "quien esté generando una polémica" sobre esta cuestión ya que es "consciente de la responsabilidad que tiene ante buena parte de la ciudadanía vasca", indicó que su partido sabe es "es el partido mayoritario en el seno del Gobierno vasco" y que "otros con otros cargos pueden decir otras cosas".

   El presidente del PNV añadió que es preciso tener en cuenta "las cosas que digamos están sujetas a los pasos que el Gobierno y las instituciones hemos de dar ante la ciudadanía" y reiteró que "no se puede pensar que, a pesar de lo que diga el TC, se va a celebrar la consulta por encima de todo cuando estamos hablando del desarrollo y ejecución de una ley que tiene la misma aplicación de una ley electoral". Por ello, explicó, "hay que designar juntas electorales, hay que ubicar los colegios y urnas, hacer una campaña, subvencionar la campaña y tiene que haber espacios gratuitos".

   En este contexto, subrayó que "no se puede pensar que un Gobierno que tiene legitimidad institucional pueda hacerlo actuando en contra de una sentencia del TC". "Otra cosa es que nos quedemos quietos. El PNV dice que no nos vamos a quedar quietos, vamos a estudiar nuevas iniciativas. Si no se puede celebrar ésta, se celebrará otra", afirmó.

   A su entender, la petición de la Abogacía del Estado de que los integrantes del tripartito y Aralar no puedan personarse en la causa constituye "una cortina de humo" con el fin de "dar la interpretación de que los partidos que hemos avalado la ley de Consulta no sabemos hacer bien las cosas".

   El líder jeltzale afirmó que le gustaría "seguir teniendo una mínima esperanza" teniendo en cuenta "la doctrina del TC" y la aplicación de "sentencias del Tribunal Europeo de Derechos Humanos en casos concretos". "Una cierta esperanza en cuanto al levantamiento de la suspensión de la ley, que es una prerrogativa del presidente del Gobierno español y que es lo que realmente los partidos que hemos aprobado la ley tenemos que denunciar", añadió.

   En cualquier caso, el presidente del Partido Nacionalista Vasco puntualizó que es "obvio" que el Tribunal Constitucional "está compuesto como está compuesto". Asimismo censuró que el Gobierno central y los dirigentes socialistas se "hayan manifestado mucho antes de que se aprobara la ley" augurando que la consulta "no se iba a celebrar".

   "Parece que hay quien desde fuera del TC sabe de antemano incluso antes de aprobarse la ley que no se va a llevar a cabo. Esto da la sensación de que el TC es un árbitro comprado, me gustaría pensar que esto no es así", apuntó.

   Por otro lado, Iñigo Urkullu afirmó que la "voluntad" de su partido es "agotar la legislatura" y explicó que, "de hecho, el PNV no ha iniciado sus procesos internos ni siquiera para plantear las candidaturas al Parlamento vasco", mientras "otros partidos como el PSE desde mayo tiene designado quién es su candidato a lehendakari" y están "en ese discurso de que no hay más remedio que unas elecciones".

   Asimismo, afirmó que "la consulta es muy importante pero no es el objetivo final" y constituye "una herramienta para saber qué opina la ciudadanía", pero "una legislatura no está marcada por el devenir de una ley de Consulta sino que está marcada porque el Gobierno vasco tenga la capacidad de llevar adelante los proyectos con los que nació en su programa de gobierno".  

   Por otra parte, se mostró convencido de que el "objetivo" de la izquierda abertzale, con el voto que dio a la ley de consulta, "no era apoyarnos". "¡Qué mayor incongruencia ya en el mismo acto parlamentario que de los 8 parlamentarios, uno vote a favor y 7 se abstengan e intervenga en el turno en sentido contrario a la iniciativa presentada!", destacó.  

   A su entender, la izquierda abertzale "va a hacer lo que más daño haga al PNV y al lehendakari" e "hicieron el juego estrambótico que hicieron hace cuatro años del proyecto de nuevo estatuto político de ceder un voto para que la ley saliera adelante pero con un discurso de 'aquí lo tenéis y a ver cómo lo gestionáis' esto no es ayudar a que la ley salga adelante".

   Asimismo, lamentó que, desde el anuncio de ruptura de alto el fuego por parte de ETA, "tenemos que estar todos los días temiendo lo peor" porque "su objetivo es sembrar el terror, no tiene otro fin".

   En este sentido, recordó que "afortunadamente durante julio ha habido detenciones de comandos y de activistas y diferentes miembros de ETA y no se han podido llevar a cabo objetivos", a pesar de que "en los primeros días de julio ha habido artefactos, a mediados en Cantabria, ayer en Málaga". "Esto es lo que tenemos que temer, ojalá esto parara cuanto antes", dijo.

   El dirigente del PNV apuntó que, en los comunicados de ETA, "se menciona a PNV una y otra vez". "Este mismo fin de semana en el comunicado de reivindicación del atentado de empresas de TAV hay una mención al PNV, si el hecho de que estemos mencionados en los comunicados supone que somos un objetivo, no voy a decir nada más", indicó.

   Urkullu mostró su "respeto" y su "solidaridad personal" con "aquellas personas, agrupaciones, organizaciones afectadas". "He hecho mía la amenaza con la que viven la militancia del PSE y PP o los empresarios extorsionados, pero no es menos cierto que el PNV viene siendo mencionado una y otra vez en los comunicados de ETA de un tiempo a esta parte", señaló el dirigente jeltzale, que hace días afirmó que "el principal enemigo" de ETA es su partido, afirmación que fue criticada por el PSE.