El semi-ayuno y los productos ecológicos fusionados contra la obesidad
- Biosabor, en su búsqueda de productos y procesos que beneficien la salud humana, ha diseñado en su Departamento de I+D+i Nutrición y Salud un protocolo de semi-ayuno donde se restringen las calorías, pero se aumentan los nutrientes
- Ha sido publicado en la revista International Journal of Recent Scientific Research
La obesidad es una de las enfermedades más silenciosas y peligrosas del mundo occidental. Dietas, medicamentos y ejercicio suelen ser los primeros pasos cuando se va a consulta, sin embargo, comienza a haber estudios que hablan de la necesidad de ayuno en algunos momentos para que el cuerpo reaccione.
Pero el ayuno no es algo nuevo para los expertos ya que, tal como cuenta Ana Molina Jiménez, responsable del Departamento de I+D+i Nutrición y Salud de Biosabor, figuras como Pitágoras hacían ayunar a sus discípulos 40 días antes de transmitirles enseñanzas, Gandhi utilizaba el ayuno como herramienta política e Hipócrates, padre de la medicina, consideraba que los alimentos en la enfermedad debilitan.
Hoy día son numerosos los investigadores que estudian los aspectos saludables del ayuno, sus modalidades y los centros donde uno puede retirarse para esta práctica bajo supervisión médica.
Estudio de Biosabor sobre el ayuno en la obesidad
La empresa almeriense Biosabor, en su búsqueda de productos y procesos que beneficien la salud humana, ha diseñado en su Departamento de I+D+i Nutrición y Salud un protocolo de semi-ayuno donde se restringen las calorías, pero se aumentan los nutrientes, lo que permite obtener un doble beneficio; el del ayuno y el de los nutrientes contenidos en las frutas, verduras y gazpacho ecológico.
Para ello, se han monitorizado durante 6 semanas los niveles de los marcadores bioquímicos en 44 personas con sobrepeso II (IMC>27) y obesidad (IMC>30), de edades comprendidas entre 30 y 65 años.
El estudio constó de dos grupos: uno siguió una dieta mediterránea hipocalórica estándar y en el otro la misma dieta mediterránea, pero introduciendo un semi-ayuno durante 5 días.
Durante estos 5 días, los participantes consumieron una cantidad controlada en calorías y nutrientes de frutas, verduras y gazpachos ecológicos de la empresa, diseñado por la responsable del Departamento de I+D+i Nutrición y Salud. Finalmente se midieron en ambos grupos parámetros inflamatorios, lípidos sanguíneos y metabolismo de hidratos de carbono.
Los resultados mostraron cómo en ambos grupos, los pacientes disminuyeron significativamente el peso total, concretamente en un 5% el grupo de semi-ayuno y un 3% el de dieta mediterránea.
También se redujo el colesterol total, los niveles de LDL disminuyeron en un 16% en el grupo de semi-ayuno y 8% en el de dieta mediterránea.
Otra cuestión importante que resaltó en las conclusiones el Dr. Ismael San Mauro Martín director de Grupo CINUSA, el centro en el que se desarrolló el estudio, es que el grupo de semi-ayuno tuvo una mayor satisfacción, motivación, sensación de bienestar y grado de adherencia a la dieta. De hecho, algunas personas del grupo de dieta mediterránea abandonaron el estudio por falta de motivación.
Sus resultados recientemente publicados en la revista internacional mencionada al principio, otorga a la empresa Biosabor seguridad en su camino en investigación y una clara diferenciación.
Según declara María Dolores Morales adjunta a dirección de la empresa e impulsora del proyecto, “En Biosabor, somos una empresa productora hortofrutícola comprometida con la salud de nuestros consumidores y del medio ambiente, destinando parte de nuestros beneficios a la investigación, innovación y desarrollo de productos ecológicos que aporten valor a la sociedad en general y a nuestros consumidores en particular, basando la comunicación en el rigor científico y la evidencia”.
En definitiva, los resultados refuerzan la necesidad de seguir estudiando estrategias que incluyan ayunos en alguna de sus formas ya no solo en obesidad sino otras patologías donde también sus efectos han mostrado beneficios como hipertensión, diabetes II, artritis reumatoide, depresión y cáncer.
Al ser estudio, además, preliminar, en ningún caso se recomienda a los particulares ponerlo en marcha sin el seguimiento de expertos en nutrición o profesionales sanitarios.