La moda gana puntos como sector estratégico dentro del mix de la Economía Española. Al menos así los pone de relieve el último informe "El Sector de la Moda en España 2015-2016, que ha elaborado ISEM Fashion Business School para el Observatorio de la Moda Española, publicado antes de verano.

Según este informe, la producción de la industria de la moda en España alcanza ya el 27,6 por ciento de la cifra de negocio anual, suponiendo el 8,4 por ciento de las exportaciones, lo que convierte a España en el cuarto exportador de la Unión Europea en moda.

Pepa and Co constituye un buen ejemplo de diseñadora española que ha hecho carrera en la City londinense y que exporta allí su hecho en España. Sus modelos han recorrido todo el mundo de la mano de los hijos pequeños de los Duqueses de Cambridge. Los modelos escogidos por Kate Middelton, duquesa de Cambridge, para sus hijos en el enlace de su hermana, se agotaron en horas.

Esta es una muestra más de que el nombre Marca España y hecho en España tienen tirón en el mundo de la moda más allá de nuestras fronteras. No en vano, el sector registró una facturación en 2015 de más de 17 millones de euros, según los datos de la Asociación Empresarial de Comercio Textil y Complementos (ACOTEX).

Los pequeños proyectos con gran proyección

Sin embargo, la industria española mayoritaria en cuanto a impacto público permanece con la producción aquí, lo que eleva el empleo, si bien de forma residual, pero incidiendo sobre todo en el ámbito rural o con mayores problemas de inserción.

Es el caso de los zapatos Laura Azaña, unos fabricantes de zapatos de mujer que acaba de abrir su tienda online de calzado femenino y ya muestra síntomas de gran éxito.

Sus impulsoras inciden en la importancia de recuperar la pujanza de la industria española del calzado. Aseguran que aquí en España existen muy buenos talleres de fabricación de calzado pero que no consiguen hacerse ver para una población que demanda calzado de calidad.

Ante la pregunta de si creen que falta impulso institucional, no lo niegan pero ponen el foco en la necesidad de autogestionarse para no depender de ayudas externas. Matizan que en su ámbito de negocio, los modelos start up con recursos semillas no funcionan. Lo que sí atrae al público es la calidad, y el trabajo bien hecho.

El público está saturado de ofertas en calzado que se rompe cada dos por tres. Nosotros ofrecemos unos zapatos de moda diferentes, hechos con los mejores materiales y técnicas de fabricación tradicionales, añaden. Se definen como auténtica marca España y se enorgullecen de la nueva línea Laura Azaña que incluye unos interesantes zapatos de tacón cómodos, aptos para mujeres femeninas que no quieren renunciar a sentirse bien y cómodas.

Los gigantes siguen impulsando el sector

Los últimos datos sobre el sector de la moda en España apuntan a que los grandes buques de la armada española ejercen de patrones en una lucha en la que las franquicias chinas quieren aterrizar.

Así, el top de los líderes indiscutibles continúa liderado por Inditex, cuyas marcas registradas prevén cerrar otro año de récord. Mango, por su parte, adolece de la fuerza que le caracterizó en años anteriores pero se mantiene en la lucha con el Grupo Cortefiel. Por su parte, Pepe Jeans y Desigual se mantienen líderes en sus mercados nicho.

A ellos, les siguen la zaga toda una legión de buenas marcas como Bimba y Lola, con una facturación en 2016 de más de 140 millones de euros.

Marypaz y Adolfo Domínguez, en plena crisis de identidad y resultados, se mantienen en un segundo plano a la espera de recuperar la pujanza que los ha caracterizado en su trayectoria. En el caso de los primeros, los expertos adolecen una sobredimensión que no ha ido acompañada de unos grandes resultados, como barruntaban desde la dirección.

Adolfo Domínguez, por su parte, da por cerrada su reestructuración con el objetivo de estabilizar la cuenta de resultados y plantear futuras líneas estratégicas que no pongan en riesgo la estabilidad del proyecto y sobre todo, la fidelidad de sus clientes.

Desde la Asociación de Creadores de Moda de España (ACME) confían en el buen momento que está viviendo el sector en general como motor de impulso de marcas que buscan afianzar sus mercados nicho.

Según sus datos y estimaciones, en 2015 el sector alcanzó los 405 millones de euros generados, comercializando tanto aquí como fuera de España casi 9 millones de prendas y complementos, donde más del 20 por ciento se ha fabricado aquí en proyectos pequeños como Laura Azaña.