Luis de Carlos Calderón. La intensidad en la persecución de decenas de millones de cristianos, en más de 40 naciones musulmanas, se manifiesta entre los que sufren acoso, torturas y asesinatos y entre los que no tienen ni libertad de culto. Según datos del Departamento de Estado norteamericano, 16 de los 20 países donde la libertad religiosa está más amenazada son de mayoría musulmana. Islamic State have adopted Islam as the ideological foundation for their political institution.Los Estados Islámicos, que han adoptado el Islam como el fundamento ideológico de su organización política, y los que asumen el Islam como State Religion are religious body or creed officially endorsed by the stReligión del Estado se alejan en la práctica de lo que entendemos sobre el Estado Confesional en el Occidente actual.

Conocida es por todos la situación de Arabia Saudí donde se impide cualquier culto no musulmán y, en consecuencia, la existencia de templos, portar símbolos como una cruz, presionándose a los cristianos con el fin de que se conviertan al Islam. En Irak, antes de ser asesinado, el arzobispo Mons. Rahho había denunciado el proyecto de eliminar el cristianismo; cientos de miles de católicos caldeos han abandonado su patria: extorsiones, secuestros, asesinatos, destrucciones de Iglesias son el presente de una Iglesia mártir. En Irán, los cristianos son tratados como ciudadanos de segunda; la literatura cristiana es ilegal; los conversos del Islam a otra religión son perseguidos a muerte y los no musulmanes están excluidos de la judicatura, las fuerzas de seguridad o la dirección de centros escolares. En la Turquía, que pretende ser europea, es imposible, para los cristianos, acceder a cargos públicos, no pudiéndose construir iglesias.
Naciones, en las que el cristianismo estaba presente siglos antes que el Islam, como Egipto, no quedan atrás: La Constitución egipcia no les concede a los cristianos representación política; los casos de conversión forzosa al Islam son habituales, mientras existe la prohibición de conversiones al cristianismo a lo que sumamos arrestos y algún secuestro de cristianos coptos e incendios y asaltos de sus centros religiosos. Y ¿qué decir de Pakistán? Es tal la persecución que, en 1998, el obispo John Joseph se suicidó para protestar contra la condena a muerte de los cristianos, pobres entre los pobres, condenados por la ley antiblasfemia o por cualquier falsa denuncia. Son muchos los países del sudeste asiático de mayoría musulmana donde se persigue a los cristianos, así en Indonesia donde, desde el año 1999, los musulmanes han asesinado a más de 19.000 cristianos y han obligado a desplazarse a otros 600.000, consiguiendo cerrar Iglesias. ¿Seguimos con Somalia y otras naciones? Más de lo mismo.

No son mejores las situaciones de los países vecinos del Sahara, ni la del amigo ni la del enemigo. En Argelia,  [ edit encarcelamiento de sacerdotes por celebrar con inmigrantes cristianos y prohibición de celebrar la Navidad y la Pascua para los residentes italianos; promulgación de la ley anti conversión 2006 para los musulmanes y prisión para conversos al cristianismo; necesidad de pedir permiso para cualquier labor pastoral; arrestos por portar biblias o libros cristianos (puede llegarse a una condena de seis años con el perdón subsiguiente si se convierten al Islam); más de una docena de iglesias cerradas. Asesinato en 1996 de siete monjes cistercienses. El arzobispo de Argel, Henri Tessier, asegura que «quieren reducir la presencia de los católicos en el país». Intento de las autoridades en el 2007 de forzar a abandonar Argelia a todos los sacerdotes y monjas nacidos en el extranjero.
En Marruecos, al decir del arzobispo de Tánger «Tenemos libertad de culto, pero no libertad religiosa». El artículo 106 de la Constitución excluye toda reforma concerniente a las disposiciones de la religión musulmana, sirviendo de garantía el artículo 6 que hace del Islam la religión del Estado. El código penal castiga con una pena de tres a seis meses de cárcel a quien induzca a la apostasía del Islam. Comer durante el Ramadán es un acto que atenta contra el artículo 222 del Código Penal que castiga con cárcel de uno a seis meses y multas de hasta 120 euros al que incumpla los preceptos del mes sagrado. Cada año, decenas de personas son encarceladas por estas disposiciones. Desde niños, los alumnos estudian el Islam ortodoxo marroquí, aprendiendo que los no musulmanes arderán en las llamas del infierno. No hay ninguna existencia legal para los ciudadanos que se convierten a una religión distinta del Islam. Los conversos marroquíes se ven condenados a la clandestinidad aún en las Iglesias reconocidas.

Sabemos que la sociedad saharaui pronto destacó por su apartamiento de la esclavitud tan presente en sociedades vecinas, sabemos que es mucho más respetuosa con la mujer que la mayoría del mundo musulmán, sabemos de sus tradiciones representativas en sus instituciones sociales y políticas y un etcétera nada despreciable. También sabemos de su convivencia pacífica y amistosa con la Iglesia Católica durante casi un siglo y de la simpatía con que se trata aún hoy, por los saharauis, a los sacerdotes, uno de ellos con cerca de cincuenta años de presencia, que continúan su labor en tierras ocupadas celebrando en los templos de El Aaiún y Villa Cisneros o Dajla.

Planteo que la RASD podría ser en el futuro, al estilo de Jordania pero superándola, todo un ejemplo de libertad en lo religioso. Según su Constitución, aunque el Islam es la religión oficial del Estado y fuente de las leyes, la libertad de expresión y creencias están reconocidas, precisando  en su art. 43 que se garantiza a los extranjeros residentes en el territorio saharaui el ejercicio de su religión y de sus costumbres sin cláusula que prohíba el libre ejercicio de una religión distinta al Islam. Ahora bien, teniendo en cuenta otros textos constitucionales paralelos con ideas parecidas en las naciones antes citadas, ¿garantizan estos postulados el derecho a la libertad religiosa entendido como el derecho a la inmunidad de coacción extrínseca (ya física ya moral) en materia religiosa, es decir, el que no se impida a nadie en materia religiosa ni tampoco se le coaccione a ella? En otras palabras, vivimos de la esperanza de que en el futuro del Sahara no sólo no se obligue a  nadie a ser musulmán sino que tampoco se reprima a nadie el derecho de convertirse al cristianismo sin que sea por ello privado de otros derechos; que los cristianos puedan ocupar cargos públicos como cualquier otro ciudadano, etc. Lo dicho, sería todo un modelo.