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El Ejército de EEUU ha conseguido matar a un cabecilla islamista que organizaba atentados contra militares y civiles

Golpe al terrorismo islamista en Irak


Redacción Madrid. 20 de noviembre.

Las fuerzas estadounidenses han matado a un líder destacado de la organización terrorista Al Qaeda buscado por planear ataques suicidas con bomba, secuestros y asesinatos, incluido el rapto y muerte de un sargento del Ejército estadounidense en 2004, según informó hoy el Ejército de este país.

   Haji Hammadi era un líder relevante del grupo miliciano islamista suní en Garma y Abu Ghraib, en la zona occidental de Bagdad, según declaró en una rueda de prensa el portavoz de las fuerzas estadounidenses en Irak, general David Perkins, quien añadió que terminaron con su vida el pasado 11 de noviembre durante un ataque en el distrito de Mansour, una zona de clase alta.

   "La supresión de un asesino que mataba inocentes a sangre fría, tanto iraquíes como personal al servicio de Estados Unidos, degradará aún más la capacidad de Al Qaeda para perpetrar (...), más ataques despiadados en Irak", señaló Perkins.

   Hammadi ha estado afiliado a Al Qaeda desde sus inicios, afirmó Perkins, quien añadió que era buscado por organizar y realizar ataques y asesinatos contra las fuerzas estadounidenses e iraquíes, responsables gubernamentales, patrullas de barrio respaldadas por Estados Unidos y civiles iraquíes.

   Entre estos ataques se incluye el secuestro y asesinato del sargento Matt Maupin en 2004. También es responsable del ataque suicida con bomba contra un consejo tribal que se reunió en Garma el pasado 26 de junio y que terminó con la vida de 20 iraquíes, incluidos el alcalde de Garma, tres marines estadounidenses y dos traductores, según Perkins.

   A principios de este mes, las fuerzas de seguridad iraquíes, apoyadas por Estados Unidos, terminaron con la vida de otro líder destacado de Al Qaeda, Abu Ghazwan, que hizo coches bomba y controlaba las células milicianas islamistas en el norte de Irak.

   Los milicianos de Al Qaeda han estado en retirada desde que los líderes tribales suníes se volvieran contra ellos y formaran patrullas vecinales, respaldadas por Estados Unidos, que les expulsaron de los baluartes en la zona occidental de Irak y Bagdad, aunque han mantenido su presencia en el norte del primero y han demostrado ser capaces de realizar ataques a gran escala.

 

Etiquetas:Irak