Iberia empieza el año con retrasos
Redacción Madrid. 2 de enero.
Iberia se vio obligada hoy a cancelar un total de 13 vuelos, empezando el año con retrasos de entre una hora y media y dos horas en todos sus vuelos, según informaron fuentes de la aerolínea.
Dichas fuentes precisaron que a la supuesta huelga de celo que los pilotos iniciaron a principios de diciembre se ha unido hoy la baja médica de siete controladores aéreos, que ha provocado el empleo de sólo el 50% de la capacidad de Madrid-Barajas, el aeropuerto ya en diciembre más castigado por las incidencias.
Así, Iberia cierra 2008 y empieza 2009 con continuos retrasos y cancelaciones. Entre los días 4 y 31 de diciembre, la aerolínea ha acumulado más de 500 cancelaciones y más de 5.000 retrasos, pese a haber alquilado 149 aviones para tratar de paliar las consecuencias de las alteraciones entre los más de 800.000 pasajeros afectados.
De esta forma, sólo en el alquiler de los 149 aviones, Iberia tuvo que desemblosar dos millones de euros, a los que hay que sumar los gastos de la reubicación de los pasajeros en vuelos de otras compañías, así como los hoteles y comidas.
"Al final Iberia tendrá que gastar varios millones de euros", recalcaron fuentes de la aerolínea, quienes subrayaron que la puntualidad de la compañía en el mes de diciembre se situó en el 35%, frente al 80% que alcanzaba la aerolínea en el mismo periodo de 2007.
La aerolínea ha reiterado en varias ocasiones que las alteraciones se deben supuestamente a una huelga de celo puesta en marcha por el Sindicato Español de Pilotos de Líneas Aéreas (Sepla) coincidiendo con la ruptura de las negociaciones para la renovación del convenio colectivo con los pilotos.
Mientras, el Sepla acusa a la compañía de no contar con el personal suficiente, especialmente de cara a la época navideña. Iberia desmintió la necesidad de contratar más pilotos, tal y como exigen desde el sindicato, teniendo en cuenta que en la actualidad dispone de 13 pilotos por avión, frente a once en 2006.
A este problema, se sumaron hoy las siete bajas médicas entre los controladores aéreos de Madrid-Barajas, aeropuerto que durante el mes de diciembre ya sufrió la mayoría de los retrasos y cancelaciones de Iberia.
La falta de personal en la torre de control del aeródromo madrileño ha provocado que los controladores optaran por trabajar sólo con dos de las cuatro pistas disponibles para gestionar así mejor la situación.
Fuentes de Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA) señalaron que teniendo en cuenta las "fechas" está siendo complicado encontrar a personal disponible para sustituir a los compañeros enfermos.