Hace meses que se oye hablar de la recuperación económica y estos días incluso la ministra de Empleo, Fátima Báñez, ha asegurado que los puestos de trabajo que se crean son, en la actualidad, de más calidad que los que destruyó la crisis económica. Un “primavera del empleo” que ha desatado más de una reacción en las redes sociales.

La deuda pública, por otra parte, amenaza la recuperación en España. Entre Estado, autonomías, municipios y Seguridad Social, asciende a 1,139 billones de euros, lo que equivale al 100,03% del PIB. Va camino de convertirse en un lastre para las nuevas generaciones, y hace a nuestra economía vulnerable a una subida de tipos y a la volatilidad del mercado.

Poco a poco, sin embargo, se registran cifras de crecimiento. Por ejemplo, en la Comunidad de Madrid, que ha crecido en el segundo trimestre de este año un 3,4%, según indicaba el viceconsejero de Economía e Innovación, Javier Ruiz.

Sirve también de indicativo los buenos números empresariales, especialmente en sectores con mucho tirón como la moda textil. El grupo catalán Mango, que ha visto caer sus ingresos y ha reducido considerablemente el número de tiendas en el exterior, ha crecido un 6% en España.

Crecimiento en el exterior

Ahondando en la situación actual de la economía, habría que considerar también cuánto crecen las empresas españolas en el exterior. Su ritmo de crecimiento medio es del 5% desde 2010, lo que las sitúa por encima de Alemania o Italia.

Según Eurostat, en número de filiales nuestro país ocupa la séptima posición de Europa, aunque claro, hay que considerar que es el quinto de la Unión Europea en PIB. Son algo más de 5.000 las que tienen las empresas españolas más allá de nuestras fronteras. Por nivel de ingresos generados, eso sí, se quedaría en la sexta posición, adelantando a Dinamarca.

Sea a través de empresas o con la compra y venta de valores internacionales, emprendedores e inversores tienen bien definidos sus criterios a la hora de invertir en el extranjero. Latinoamérica y el Caribe, ha centrado el interés, aunque ha atravesado una recesión en los últimos años que les ha hecho experimentar un descenso del PIB 0,2% en 2015 y del 0,7% en 2016, según una infografía de Statista.

La razón son las desaceleraciones económicas de los estados más poblados. Sin embargo, el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional han estimado que América Latina saldrá este año de la recesión tras un 2016 difícil, gracias al impulso de Argentina y Brasil. Para el primero, por ejemplo, se pronostica un crecimiento del 2,7% del PIB, según el BM, y del 2,4% según el FMI.

Los atractivos de Uruguay

Un país que trata de hacer llegar sus atractivos es Uruguay, que ha visto crecer considerablemente, por ejemplo, su sector inmobiliario. Los grandes proyectos han transformado el aspecto de sus ciudades más importantes, y hoy inmobiliarias online como Infocasas consideran los alquileres en Uruguay rentables, una inversión segura.

Uno de los motivos que animan a la inversión en el país es la estabilidad política, jurídica y social. Así lo asegura la agencia de promoción de inversiones y exportaciones Uruguay XXI, que habla de una democracia consolidada, con tres partidos mayoritarios que se han alternado en el gobierno y mantienen “un fuerte respeto por las reglas del juego”, explican, así como por los fundamentos esenciales de la actividad económica.

La agencia recoge un gráfico que compara su situación con la de otros países de la región, basándose en estudios de otras entidades. Uruguay ocuparía así el primer puesto en índice de democracia, en baja corrupción, en prosperidad y en Estado de Derecho. Sería el segundo en libertad de prensa y el tercero en índice global de paz y en libertad económica.

Desde el país también se enarbola la bandera de la solidez macroeconómica. La economía uruguaya “ha logrado el crecimiento más largo de largo de la historia, al acumular 12 años ininterrumpidos de aumento del producto”, explican desde Uruguay XXI. La expansión promedio anual ha sido del 5,4%, entre 2004 y 2014, con un crecimiento del PIB per cápita del 10.000 USD en 2015 a 17.000 en 2014.

Es considerado un país con grado inversor elevado por agencias internacionales como Moody’s, que ratificó tal calificación en 2015 por la ausencia de desequilibrios macroeconómicos y el compromiso con la sostenibilidad fiscal, explican desde Uruguay XXI.

Vivir en Montevideo

El país, y especialmente la capital, también presenta atractivos para quienes no sean grandes inversores pero quieran vivir en Uruguay, y tener posibilidades de trabajar o prosperar con negocios propios. Es cierto, sin embargo, que los alquileres en montevideo, con sus precios crecientes, presenten más ventajas para los propietarios.

Recientemente los precios se han abaratado para las familias, pero siguen siendo los grandes inversores los principales compradores. Y es que estos han identificado el interés por vivir, sobre todo, en apartamentos barrios seguros.

Según Infocasas, entre las zonas más demandadas para el alquiler de casas están el barrio Pocitos y Punta Carretas, lo que muestra la preferencia por las zonas costeras. El primero se caracteriza por edificios de apartamentos de diez a veinte plantas, conviviendo con otras construcciones más antiguas, y suele centrar el foco de las clases medias altas, aunque por detrás de Carrasco.

Pocitos presenta una amplia oferta, por ejemplo, de locales gastronómicos con nacional e internacional, tiendas, una amplia rambla (paseo marítimo), buenas comunicaciones y, en definitiva, unos atractivos que justifican que sea el barrio más densamente poblado de Montevideo.

Punta Carretas, por su parte, no le va a la zaga. Situado ante la punta rocosa sobre el mar al que debe su nombre el barrio, entre sus sitios destacados se encuentra el Faro de Punta Brava, construido en 1876. La antigua Penitenciaría de Punta Carretas, por su parte, se convirtió a principios de los 90 en un gran centro comercial, el Punta Carretas Shopping Center, lo que también llama cada día a muchos visitantes.