Redacción Madrid. 4 de agosto.

El Ejército israelí anunció hoy que va a trasladar a Cisjordania a varias decenas de palestinos afines a Al Fatá que huyeron a Israel tras los intensos combates con las fuerzas de seguridad y las milicias del Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) en la Franja de Gaza.

   La decisión de Israel de trasladarlos a la ciudad de Ramala (Cisjordania), zona de influencia del presidente palestino, Mahmud Abbas, se produce justo un día después de que Hamás anunciara la detención de 30 activistas del clan Helles, afín a Al Fatá, que Israel devolvió ayer a la Franja de Gaza.

   Este clan, uno de los mejor armados de Gaza, fue muy criticado por algunos dirigentes de Al Fatá por no resistirse a la toma del poder en la Franja por parte de Hamás en junio de 2007. Según Israel, los 30 miembros del clan Helles fueron enviados a la Franja por iniciativa de Abbas y del primer ministro palestino, Salam Fayyad.

   No obstante, el Ejército israelí indicó en un comunicado que las autoridades "detuvieron el proceso" al recibir la noticia de que los miembros del clan estaban siendo arrestados por Hamás. Así, añadió que varios de los activistas de Al Fatá permanecerán de momento en el hospital israelí de Barzilai, próximo a la Franja de Gaza, donde fueron atendidos por las heridas que sufrieron en los combates.

   Tras un importante ataque de Hamás contra el barrio del clan en Ciudad de Gaza el sábado pasado, unos 180 miembros de este grupo obtuvieron refugio en Israel de forma temporal. En el enfrentamiento posterior al ataque murieron once palestinos y más de 90 resultaron heridos.

   Hamás justificó el ataque diciendo que su objetivo era detener a varios hombres a los que acusaba de perpetrar un atentado con bomba que el pasado 25 de julio mató a cinco miembros del Movimiento de Resistencia Islámica y a una niña. Este atentado desencadenó numerosas detenciones mutuas entre miembros de Hamás y de Al Fatá, tanto en Cisjordania como en la Franja de Gaza.