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fue derrocado en agosto y llevaba recluido en su ciudad desde noviembre

La Junta Militar libera al ex-presidente Abdallahi

Redacción Madrid. 21 de diciembre.

  La Junta Militar de Mauritania liberó hoy de su arresto domiciliario al presidente electo, Sidi Mohamed Ould Cheikh Abdallahi, derrocado en un golpe de Estado perpetrado el pasado 6 de agosto y retenido en su ciudad natal de Lemden desde medidados del mes de noviembre, según informó uno de sus socios políticos, Moulay Eli Ould Ahmed.

   Abdallahi, el primer presidente elegido democráticamente en la historia de Mauritania, fue derrocado el pasado 6 de agosto mediante un golpe de Estado liderado por el jefe de la Guardia Presidencial, el general Mohamed Ould Abdelaziz, quien había sido destituido esa misma mañana junto a otros tres altos cargos militares y que había formado parte, al igual que los otros golpistas, de la junta militar que tomó el poder hace justamente tres años en otro golpe de Estado.

   Los militares constituyeron un Consejo de Estado presidido por el propio general Abdelaziz y anunciaron la destitución y posterior arresto de Abdallahi, quien en su momento llegó a ser considerado el "títere" de la junta militar de 2005.

   Los sucesos de agosto fueron el resultado de varios meses de grave crisis política que empeoró dramáticamente en los prolegómenos al golpe. En mayo, el presidente destituyó al Gobierno a causa de las críticas al Ejecutivo por su respuesta al alza de los precios de los alimentos y a los ataques efectuados por el brazo de Al Qaeda en el norte de África. El nuevo Gobierno, formado sin la presencia de la opositora Unión de Fuerzas para el Progreso (UFP) y de los islamistas de Tawassoul, que habían formado parte del anterior gabinete, dimitió el pasado mes de julio cuando se iba a enfrentar a una moción de censura.

   Para agravar las cosas, un grupo de 48 parlamentarios afines al presidente abandonaron justo el día anterior las filas del partido de Abdallahi, el Pacto Nacional para la Democracia y el Desarrollo (PNDD-ADIL), y anunciaron la creación de una nueva coalición, una acción que, según fuentes políticas, había sido apoyada por los mismos altos mandos militares que perpetraron el golpe de Estado.

REACCIÓN DEL GOBIERNO ESPAÑOL

 El Gobierno español se congratuló por la liberación "necesaria y positiva" del presidente de Mauritania, Sidi Mohamed Ould Cheikh Abdallahi, derrocado en un golpe de estado perpetrado el pasado mes de agosto y bajo arresto domiciliario hasta hoy.

   "Esta medida, necesaria y positiva, puede representar un paso importante para la recuperación de la normalidad democrática y constitucional", apuntó el comunicado oficial

   "En este sentido, el Gobierno español confía en que los Estados Generales de la Democracia convocados para dentro de pocos días con el objetivo de alcanzar una amplia concertación nacional, sirvan para encauzar una soluciòn de la crisis dialogada entre todos los mauritanos, y que se pueda consolidar así un marco pactado de estabilidad, gobernabilidad democràtica y prosperidad para ese país vecino y amigo", concluyó el Gobierno.

   Sidi Mohamed Ould Cheikh Abdallahi, el primer presidente elegido democráticamente en la historia de Mauritania, fue derrocado el pasado 6 de agosto mediante un golpe de Estado liderado por el jefe de la Guardia Presidencial, el general Mohamed Ould Abdelaziz, quien había sido destituido esa misma mañana junto a otros tres altos cargos militares y que había formado parte, al igual que los otros golpistas, de la junta militar que tomó el poder hace justamente tres años en otro golpe de Estado.

   Los militares constituyeron un Consejo de Estado presidido por el propio general Abdelaziz y anunciaron la destitución y posterior arresto de Abdallahi, quien en su momento llegó a ser considerado el "títere" de la junta militar de 2005.

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