La opción desesperada de los nacionalistas
Luis Alfonso
Zapatero escucha desde todos los frentes los sonidos de las elecciones anticipadas, unos porque dicen que son obligatorias y otros porque lo niegan. Lo que importa es que el tema va a apareciendo en la arena política porque la situación española en la que nos han dejado inmersos es muy complicada.
Ante este tema Zapatero utiliza su discurso habitual, palabras bonitas, vacías y sin orden, con entonaciones perfectas para sacar unos cortes en la prensa, pero sin hilo, sin fundamento, fuera de la realidad y sin tener en cuenta las necesidades de los españoles.
Los nacionalistas están buscando petróleo en este campo, buscan unos compromisos que ayuden a terminar la legislatura a cambio de unos costes políticos indefendibles en la mayoría de las cabezas de los españoles. Todo lo que ayuda a dejar pasar el tiempo vale. Las cesiones al PNV y el Estatuto de Cataluña son un primer botón de muestra, pero veremos más, veremos nuevos acercamientos que deshonren a España y a los españoles.
El debate sobre el Estado de la Nación ha valido para destapar las intenciones del Presidente, para destapar que por encima de la ley está Zapatero. De hecho a anunciado que va a intentar llevarse por delante todo aquel y todo aquello que no concuerde con sus ideas, unas ideas que todavía no ha dicho. Si conociéramos los principios del Presidente podríamos juzgarlos, pero como cambian con cada nuevo problema no sabemos cuál es el destino. Los nacionalistas los saben y se aprovechan, barren hacia su casa y recogen las viandasde la mesa que Zapatero ha vestido de opulencia y ahora no puede manejar.