Jesús Asensi Vendrel. Nunca llueve a gusto de todos porque somos libres y capaces de negar lo evidente. Por eso, lo que para algunos es una exaltación y merecido homenaje a la mujer, es para otros una manifestación más del machismo reinante en nuestra sociedad.
Y es que lo que pasa aquí en Valencia parece ser invisible e incomprensible para aquellos que piensan que los españoles son y serán machistas por naturaleza. Pues resulta que los valencianos son capaces, en pleno siglo XXI, de exaltar y poner en primer lugar y como protagonista principal a la mujer en una festividad dedicada a un hombre. Así es, pues en las fallas de Valencia que se erigen en honor a San José, que según la tradición era carpintero, la principal ofrenda floral se la lleva su esposa, la “Mare de Déu”, y la reina de las fiestas es otra mujer, la Fallera Mayor de Valencia.
Algunos pensarán que la festividad de las Fallas de San José es una manifestación más del machismo reinante. Y es que, gracias a la libertad que disfrutamos, son capaces de negar lo evidente y mucho más. ¿No creen?