La soberbia de la ideología y los curas vascos
Pilar Prados de la Plaza. Desde que aprendimos el Catecismo, sabemos los católicos que las notas de la Iglesia son: Una, Santa, Católica y Apostólica y debemos procurar vivir personalmente y con coherencia cada uno de esos aspectos. Me refiero a unos cuantos sacerdotes de mi querida Guipuzcoa que desaprueban en un comunicado, el nombramiento de Monseñor Munilla como nuevo Obispo de San Sebastian, faltando a la unidad.
A estos curas les ha pasado como a los primeros cristianos que residían en Corinto que aunque participaban de la misma Cena del Señor, unos se declaraban partidarios de Pedro, Pablo o Apolo. Pero Pablo va al fondo de la cuestión y no se pone a discutir sus puntos de vista o tendencias, ni da la razón a unos o a otros, sino que contrapone vigorosamente el mensaje de la Cruz a la sabiduría de este mundo., añadiendo: “la fe no puede estar fundada en la sabiduría de los hombres, sino en el poder de Dios” (Corintios 2.5).